"Es el homenaje mínimo que se merece". Este es el sentimiento que ha impulsado a los compañeros de trabajo de Hugo Suárez Martínez en la fábrica corverana de Fertiberia a organizar una marcha a pie entre la factoría y la iglesia de Trasona, donde se la celebró el funeral por el eterno descanso del futbolista del Llaranes, C. F. que perdió la vida el pasado domingo mientras jugaba un partido en el campo de Miranda (Avilés).

La consternación por un suceso tan trágico se extiende del ámbito laboral al deportivo. La gran familia del deporte asturiano, más allá del fútbol, está conmovida por una muerte tan inesperada como lamentable. El reguero de personas que desde el lunes acudió al tanatorio de Avilés a expresar su pésame a la familia de Hugo Suárez y al club donde jugaba siguió durante esta mañana y la iglesia parroquial de Trasona se quedó pequeña para albergar a los cientos de personas que quisieron despedir al futbolista y consolar a la gente de su entorno.

El Ayuntamiento de Corvera vive hoy el segundo día de luto oficial por la muerte de Hugo Suárez, que residía en la localidad de Los Campos y con tal motivo las banderas de los organismos oficiales ondean a media asta.