Belén Fernández, sabuguera de nacimiento y de corazón, se convertirá en unos días en la primera hermana mayor de una cofradía de Semana Santa en Avilés, y de las pocas que existen en Asturias. Madre y ama de casa, lleva la contabilidad de su marido, autónomo, y esta experiencia le vino bien para ocupar, en los últimos tres años, la tesorería de la Cofradía de la Virgen de la Soledad y la Santa Vera Cruz. Ahora ha llegado el momento de dar el paso y asumir las riendas de la hermandad. La toma de posesión de la nueva junta de gobierno será el martes 29 de marzo, momento en el que Fernández ocupará el cargo que hasta ahora desempeñó Rubén Tárrega.
-Es singular que haya habido que esperar al año 2016 para que una cofradía avilesina cuente con una hermana mayor al frente. ¿A qué lo atribuye?
-No sabría decir. La verdad es que me sorprende que sea la primera en Avilés. Realmente no le doy tanta importancia al cargo, soy una cofrade más y seguiré trabajando por y para la cofradía como hasta ahora. Espero estar a la altura.
-Quizá tenga que ver con el papel de la mujer en la Iglesia. Es la que más participa pero no de forma visible.
-Sí, puede ser. Somos 500 cofrades en esta cofradía y 350 somos mujeres. Alguna tenía que romper el hielo.
-¿Cómo se vinculó a la Cofradía de la Soledad?
-Ya desde pequeña tengo pasión por la Virgen, iba detrás en las procesiones con mi madre. Y cofrade lo seré desde hace 16 o 17 años. Nací en Rui Pérez y soy de la parroquia de Sabugo: allí me bauticé, hice la primera comunión, la confirmación y me casé. Y en la junta directiva de La Soledad llevo 3 años, como tesorera. Ahora, para tomar la decisión de ser hermana mayor, he preguntado a la familia porque es algo que lleva muchas horas. Y me han apoyado. El último empuje me lo dio la Virgen de la Soledad. No puede ser que la cofradía se quede sin nadie que coja las riendas. Pero hay que tener en cuenta que somos un grupo de gente trabajando, yo seré la hermana mayor pero al final va a funcionar la junta, somos un equipo.
-Tras llevar la tesorería, imagino que no tenderá al dispendio como hermana mayor.
-Soy bastante ahorradora, pretendo invertir sólo en lo necesario. La Cofradía se basa en la obra social: ayudar a los demás. Y, junto a eso, mirar por el patrimonio, que significa tener la imagen de la Virgen y el Lignum Crucis impolutos. Voy a seguir por esa línea y tratar de estar a la altura de los anteriores hermanos mayores.
-La Semana Santa ya está a la vuelta de la esquina. ¿Qué tal los preparativos?
-Bien. El lunes comenzaremos a limpiar los objetos para la procesión, con ayuda de los cofrades. A la Virgen la vestimos el Jueves Santo siete camareras. En este caso son todo mujeres.
-¿Qué tal la cantera?
-Tenemos un grupito de jóvenes en la banda, y también cofrades pequeñitos.
-¿Cuál será su prioridad como hermana mayor?
-Apoyarnos unos a otros para que esto no desaparezca.
