El entorno de la Factoría Cultural es un coto vedado a los coches. La entrada al complejo ha quedado "inutilizada" tras la colocación de unos cubos de hormigón de manera estratégica. Algunos vecinos de la zona habían denunciado en varias ocasiones que los coches accedían al recinto de la Factoría Cultural, incluso por dirección prohibida, con el consiguiente peligro para los que transitan por la zona. Los residentes afirmaron entonces que la situación se agravaba a la hora de la salida del colegio Palacio Valdés ya que muchos padres, como las zonas de carga y descarga de las inmediaciones estaban ocupadas, accedían al centro cultural y aparcaban en lugar prohibido: "Un día va a haber un percance, como el atropello de un niño, y ya será tarde", aseguraron los vecinos, informa T. CEMBRANOS.