La comisión de Industria del Congreso acordó el martes exigir al Gobierno de España que se ponga manos a la obra y arregle el problema de la tarifa eléctrica para las empresas electrointensivas, esto es, las grandes consumidoras de energía (tres de ellas están radicadas en la comarca de Avilés: Alcoa, Asturiana de Zinc y Arcelor). La exigencia de los diputados, sin embargo, fue recibida de manera gélida en la planta aluminera de Avilés. "Esperemos que esto no sea un brindis al sol. Este tipo de iniciativas las vemos siempre muy bien. Parecen buenas palabras, pero no veo sustancia, no dicen cómo van a arreglar el problema", se lamentó José Manuel Gómez de la Uz, que aparte de presidir el comité de la fábrica que la multinacional tiene en Avilés, es el secretario de la sección intercentros de Comisiones Obreras en la empresa. "No nos gustaría que todo esta exigencia venga sólo de cara a las elecciones", apostilló el líder sindical.

Lo que los diputados reclaman es que el Gobierno lleve a cabo las reformas necesarias para crear un nuevo sistema de suministro eléctrico que garantice precios "competitivos, estables y predecibles" para la industria. Esto es, precisamente, lo que vienen reclamando los sindicatos de la comarca desde la crisis de Alcoa en 2014, cuando la multinacional planteó un posible cierre de sus instalaciones ante el fracaso de la primera subasta eléctrica de interrumpibilidad (el dinero que cobran los grandes consumidores en caso de que Red Eléctrica necesite retirarles el suministro eléctrico).

Alcoa cuenta con la energía eléctrica como materia prima, esto es, precisa de una tarifa competitiva con el fin de desarrollar su trabajo. "Esto no se consigue con subastas anuales. No se programa el trabajo así", subrayó De la Uz. "Nosotros no apoyamos el sistema de subastas, pero a la vista de cómo estamos es seguro que este año la volveremos a tener, como en 2015 y como en 2014", añadió el presidente del comité de empresa de Alcoa.

"Sin un precio adecuado de la energía eléctrica, Alcoa no tiene pensado incrementar su producción ni, por supuesto, hacer inversiones, que son precisas para volver a poner todo esto en marcha", apuntó De la Uz. Alcoa en Avilés lleva años produciendo al 66 por ciento de su capacidad.