La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Las obras de mejora de la nacional que cruza Avilés se quedan en 50.000 euros

El Ministerio limita su actuación en las avenidas de Los Telares y Lugo, que comenzará en días, a la eliminación de los grandes baches

Conos para señalizar un bache en la avenida de Los Telares. MARA VILLAMUZA

Los grandes baches de las avenidas de Los Telares y Lugo pueden tener los días contados. La Demarcación General de Carreteras destinará 50.000 euros para la reparación de algunos tramos de la carretera N-632 a su paso por Avilés, aquellos que presentan un mayor grado de deterioro por el constante paso de tráfico, sobre todo, pesado. Aún no hay una fecha concreta para el inicio de los trabajos de reparación, pero en medios municipales se confía en que sea en un breve periodo de tiempo.

Los técnicos del Ministerio de Fomento estuvieron en la ciudad hace unas semanas para comprobar in situ la situación del vial y analizar las posibles mejoras. El mal estado de la avenida de Los Telares y de la avenida de Lugo es una queja constante de residentes y conductores. La carretera acumula más de medio centenar de baches y en los días de lluvia, ese mal estado provoca que el agua se acumule en las orillas. Los vecinos, hartos de no ser escuchados, han recogido firmas, organizado movilizaciones... pero sin efecto alguno hasta el momento. La inversión que ahora destina el Estado no permite arreglar todos los desperfectos. Algunos cálculos estiman que para arreglar la carretera, sin incluir aceras ni renovación de servicios, se necesitarían unos dos millones de euros.

Hace dos meses, el pleno municipal aprobó, con el único voto en contra del Partido Popular, exigir la reparación de la calzada de la N-632 en las avenidas de Los Telares y Lugo y solicitar la reclamación de los tramos de carretera de titularidad nacional para el Ayuntamiento, pero a cambio de una compensación económica. Lo que se pone encima de la mesa es una reparación integral. Y así se lo hizo saber hace unas semanas la alcaldesa, Mariví Monteserín, a través de una carta a Fomento, en la que recordó que, por ese tramo de carretera -el que comunica el parque del Muelle con el límite con Castrillón-, pasan cada día miles de camiones tanto de entrada como de salida de las empresas ubicadas en el entorno del puerto. La Alcaldesa aseguró en la misiva que las labores de mantenimiento que hasta ahora ha acometido el Estado -rebacheos, asfaltados...- no suponen más que un mero parche ante un problema que genera no sólo las críticas vecinales, sino también las de los camioneros y las de conductores tanto de vehículos particulares como profesionales del transporte público (autobuses y taxis).

El problema de baches y deficiencias en la N-632 no se suspenderá hasta que no se construya un acceso directo desde la autovía del Cantábrico hasta la zona portuaria, un proyecto que se alarga en el tiempo. La propuesta que recibió el visto bueno de Fomento, la conocida como ronda norte, está actualmente en el juzgado tras el recurso interpuesto por el Ayuntamiento de Castrillón contra la decisión por no haber contado con su opinión. También se opone a esa solución por afectar a parte de sus terrenos.

Mientras tanto, los que padecen la precaria situación del vial son los vecinos y los conductores que día a día tienen que sortear las decenas de "trampas" que aguardan en la carretera. Antonio Cabrera, presidente de la asociación de vecinos de Jardín de Cantos, es el más beligerante contra esta decisión. "Los coches se dejan las ruedas en esta carretera por culpa de los baches y los peatones apenas pueden transitar por las aceras, sobre todo en días de lluvia porque más que charcos se forman piscinas", reitera de manera habitual el líder vecinal. Ahora, habrá una solución muy parcial. Habrá que esperar a la respuesta de los afectados.

Compartir el artículo

stats