Cuatro trabajadores de la empresa Ingeniería Montajes del Norte (Imsa) que se intoxicaron por mercurio en el otoño de 2012 cuando trabajaban en Asturiana de Zinc (Azsa) reclaman indemnizaciones millonarias. El juzgado de lo Social número 2 de Avilés dirimirá la próxima semana en dos sesiones la petición de los trabajadores, representados por el laboralista avilesino Marco Antonio Iglesias y por Irene Arechavala. El juez ha decidido acumular en un mismo juicio los cuatro pleitos por daños y perjuicios.

Un estudio concluyó que los trabajadores respiraron el mercurio, echando por tierra otras opciones que se habían barajado durante la "crisis del mercurio", como que los trabajadores hubieran podido comer el metal o que viniera arrastrado por amalgamas (empastes) en su dentaduras.