Las huellas halladas en el playa de Viodo el pasado fin de semana no eran de ave marina sino de un mustélido. Al menos eso creen los expertos en la materia. Unos entienden que se trata de un tejón y otros se decantan más por la nutria, ambos de este tipo de mamífero, aunque ninguno sabe precisar con exactitud qué animal dejó sus marcas en el arenal más próximo al Cabo Peñas. "Los agujeros que encontraron al margen de las huellas no son hechos por animales, son una acción humana", señala el biólogo Luis Laria a primera vista. Otros expertos indican que los rastros de cola próximos a las huellas pueden ser más propios de una nutria, una especie que había desaparecido en este paraje hace años. "Si deja rastro de cola y por el hábitat, veo más factible que sea una nutria", destacan estas fuentes.

La razón para descartar que las huellas sean de un ave es sencilla. "Las aves marinas son palmípedas y aunque no se vean todas las uñas marcadas -se podían ver tres- todo apunta a que se trata de un mustélido", indica Laria. María Rodríguez y Pedro Jiménez, los vecinos que hallaron las huellas, indicaron que se trataba de un animal bípedo. Ante esa cuestión, los especialistas indican que las marcas pudieron haberse borrado. "Un ave marina no es, desde luego", añaden, con total seguridad.

Los expertos consultados por este periódico coinciden en que las huellas se corresponden con un mustélido y también en que los agujeros de gran tamaño no fueron utilizados para que un ave desovara en plena playa, como indicaron Rodríguez y Jiménez, vecinos de Viodo que encontraron las marcas el pasado sábado mientras paseaban por el arenal con su perra "Mati".

El hecho del desove en una playa es una cuestión harto difícil teniendo en cuenta que el ecosistema del litoral asturiano no existen especies con esta práctica.