La asociación de vecinos de Bayas mantiene su rechazo a la playa canina pese a que ayer una asamblea decidió renunciar a los cortes de carretera como método de protesta. Los miembros del colectivo presidido por Manuel Redondo atendieron así las advertencias realizadas días atrás por Delegación de Gobierno. "Nos comentaron que los cortes pueden causar un peligro para las personas, sobre todo, teniendo en cuenta que afecta a la entrada y salida de la playa", destacó el dirigente vecinal, que afirmó además que no abandonará la lucha contra la playa canina, aunque lo hará a través de otros cauces.

"Quizá nuestras denuncias sean de otra manera, bien haciendo fotos de perros sueltos en plena playa u otras medidas", expresó el dirigente vecinal, que advirtió además de que ayer, hacia las seis y media de la tarde, había "cincuenta perros en la playa y el 95 por ciento de ellos estaban sueltos". Eso, dice, incumple la normativa porque los canes "tienen que estar atados con una correa de dos metros de largo" y en una zona vallada. "Y apenas se cumple nada de eso, es más, no hay ni papeleras para tirar los excrementos de los animales", destacó Redondo, que tiene perro, pero considera que la playa no es un lugar para estos animales de compañía. Y como él, piensan un nutrido grupo de vecinos de las zonas más próximas al Sablón, como también se denomina a este arenal.

Redondo destacó además que la playa es un Monumento Natural y que el arenal anexo, Los Quebrantos, en San Juan de La Arena, cuenta con bandera azul. "¿Qué playa protegida tenemos si se permite el acceso a los perros? ¿Los Quebrantos perderá la bandera azul?", se preguntó el dirigente vecinal, que criticó que la medida municipal de habilitar una playa canina en Bayas genera más masificación. "Ahora vendrá más gente y eso teniendo en cuenta los ya de por sí problemas de tráfico que tenemos cada día de sol", concluyó.