Asturias está en la diana de las bandas organizadas nacionales y extranjeras dedicadas a robar en pisos y casas, incluso habitadas, y las fuerzas del orden no dan abasto. Desde el pasado abril, los agentes han detenido a los integrantes de cuatro grupos itinerantes dedicados a desvalijar viviendas, el último en Avilés, el 12 de julio. Entonces, los policías arrestaron a dos mujeres croatas de 22 años de edad que supuestamente estaban robando en el interior de un domicilio después de haber fracturado la cerradura de la puerta de acceso. Ambas mujeres, según comunicaron medios policiales, forman parte de un grupo criminal itinerante asentado en el Levante y dedicado a cometer este tipo de delitos en todo el territorio nacional.

La alta capacidad de movilidad de los cacos dificulta más detenciones: gracias a la mejora de las carreteras, especialmente, un caco que hoy roba en Avilés en tres horas puede estar en Bilbao y tener su cuartel general en el sur de Francia. Las dos croatas pilladas "in fraganti" en Avilés -actuaron, según los agentes, en tres viviendas de Sabugo y Las Meanas- portaban en el momento de la detención diferentes herramientas y útiles para cometer los delitos. Una de ellas ya había asaltado un piso en Oviedo en 2014 y había sido detenida ese mismo año en La Coruña.

La Policía tiene constancia de robos de los integrantes de la banda a la que pertenecen las dos jóvenes croatas en ciudades tan distantes como Sevilla, Zaragoza, Albacete, La Coruña u Oviedo, pero fue en Avilés donde los agentes finalmente le pusieron freno a su incansable actividad delictiva. Los integrantes de la banda entraban en las viviendas tras manipular o forzar las cerraduras de las puertas de acceso y, una vez en el interior, sustraían joyas y dinero en efectivo así como equipos electrónicos e informáticos. El trabajo de estas bandas es rápido.

Los investigador miembros de la organización criminal acuden a los domicilios en pareja, mientras terceras personas a veces vigilan las inmediaciones de los pisos. Dichas bandas se surten de mujeres jóvenes intentado darles una apariencia de ciudadanas españolas, siempre según medios policiales. El fin último es no levantar sospechas entre los vecinos. Pero en Avilés fue la colaboración ciudadana la que facilitó el trabajo de la Policía Nacional, que anima a los vecinos a llamar al 091 ante cualquier "síntoma sospechoso": ruidos en viviendas desocupadas, extraños merodeando un portal...

Las dos detenidas en Avilés pasaron a disposición de la autoridad judicial y a petición del ministerio fiscal están desde hace días en el centro penitenciario de Villabona.

Con esta detención, la Policía Nacional ya ha desarticulado cuatro grupos itinerantes dedicados al robo en interior de domicilios. La Guardia Civil en los últimos meses también ha detenido a numerosas personas como autores de robos y hurtos en viviendas. En abril, por ejemplo, la Benemérita detuvo a seis personas acusadas de 38 robos en el Oriente de Asturias y Cantabria.

Los robos en domicilios en Asturias han aumentado un 78 por ciento en el primer trimestre de este año respecto a los mismos meses de 2015. Siero y Avilés registraron en este tipo de delitos los mayores aumentos, superiores al cien por ciento, seguidos de Gijón. En la zona rural también se produjeron numerosos asaltos en las últimos meses.