La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

PEDRO SABANDO | Médico, exdiputado, exsenador y exconsejero de Salud de la Comunidad de Madrid

"El HUCA es un lujo legítimo y necesario que ha alcanzado el nivel de hospital de vanguardia"

"Los problemas actuales, como la financiación, obligan a sacar adelante una ley general de sanidad del siglo XXI"

Pedro Sabando. RICARDO SOLÍS

Pedro Sabando Suárez (Gijón, 1941) es miembro del Consejo Consultivo de la Comunidad de Madrid y fue subsecretario de Sanidad en el primer gobierno de Felipe González. También fue presidente del Partido Socialista de Madrid (PSM-PSOE). Habitual en los cursos de La Granda, en esta ocasión codirige un curso sobre las terapias biológicas junto a José María Álvaro-Gracia Álvaro, jefe de la unidad de terapias biológicas del Hospital La Princesa (Madrid).

-Un año más regresa a La Granda

-Aquí estamos para hablar con tranquilidad pero sobre todo para discutir, reflexionar y escuchar a los demás, que buena falta hace.

-Las terapias biológicas existen desde hace aproximadamente tres lustros. ¿En qué punto estamos ahora mismo en España en cuanto a su aplicación?

-En un proceso relativamente avanzado. Estos medicamentos ya se están aplicando en reumatología de una manera sistemática, regularizada y, a mi juicio, normalizada. También se están utilizando en otras especialidades como es dermatología, concretamente aquí en Asturias el doctor Coto (este mediodía pronuncia una conferencia en La Granda) es un gran especialista en terapias biológicas en psoriasis. Las terapias biológicas se utilizan asimismo en enfermedades intestinales y ahora se ha desarrollado un buen número de monoclonales dirigidos a tratamientos de tumores, sobre todo enfocados al cáncer de mama y de colon que se utilizan como coadyuvantes del tratamiento habitual.

-El consejero de Salud ha advertido del alto coste de las terapias biológicas

-Así es. Existe la incertidumbre de medir adecuadamente el precio de estos medicamentos que suponen una carga importante para el sistema. Esta es un arma terapéutica que debe estar en manos de especialistas que sepan adecuar con mucha precisión el tratamiento, sepan medir las dosis y sepan llevar a cabo el proceso de privación de la terapéutica cuando sea necesario.

-Ha tenido un papel relevante en la redacción de la ley general de Sanidad de 1986. ¿Todo sigue como entonces?

-Creo que en este momento en el sistema sanitario público español sufre una serie de problemas que no existían cuando hicimos la ley general de sanidad y que obliga a llevar adelante una Ley del siglo XXI que aborde los problemas actuales.

-¿Cómo por ejemplo?

-Como la financiación o la superposición de la oferta sanitaria en zonas limítrofes. También una nueva ley debería abordar la política farmacéutica, las patentes? Hay que tratar seriamente la política de personal pensando en los médicos, cirujanos o personal de enfermería que desarrollan una labor extraordinaria pero que en ocasiones se ven frustrados con el propio sistema porque entienden que no se les reconocen sus méritos.

-¿Qué radiografía del actual Sistema de Salud?

-Es un sistema que establece la ley general de Sanidad de la que hablábamos, un sistema descentralizado, y echo de menos que se desarrolle un consejo interterritorial de salud que coordine las actividades de los sistemas de salud de las comunidades.

-¿Hay mucha diferencia entre ser paciente en Pamplona o en Lugo, por ejemplo?

-En general, no. Puede haber alguna diferencia específica en alguna cuestión concreta pero justamente por eso es necesario que exista un consejo interterritorial de salud. Por un paciente o por un caso concreto no debe ser necesario hacer una estructura de servicios si en una comunidad próxima se le puede atender correctamente.

-Llevamos años de recortes...

-Así es y hay que tener mucho cuidado con los recortes en el mundo sanitario porque el mínimo deterioro se recupera con gran dificultad, no solo por la tecnología sino por la idiosincrasia y las características de los profesionales, personas con una carrera de seis años, una residencia de cuatro o cinco y estancias fuera de España que han sido incorporadas al sistema sanitario. Estas personas tienen que ser tratadas con mucho cuidado porque cualquier problema puede desajustar la implicación que tienen con el sistema.

-¿Qué opina del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA)?

-Es un lujo legítimo y necesario. En pocos años puede transformarse en un hospital que sea citado en el conjunto de España como uno de los logros importantes. Creo que en el HUCA han confluido muchos esfuerzos que en algunos casos han sido injustamente criticados y que ha alcanzado un nivel de hospital de vanguardia. Creo que en una comunidad como Asturias tener un hospital central donde puedan confluir capacidades asistenciales, docentes e investigadoras además de trabajo clínico, médico y quirúrgico de vanguardia me parece que es necesario. También opino que en el mundo hospitalario no se debe poner un centro a la puerta de cada casa, algo que reivindican ahora distintos municipios. Los hospitales han de ser competentes, no pueden caer en la mediocridad, y para que así sea deben tener enfermos suficientes o se oxidan.

-¿Se investiga lo necesario?

-Se investiga en España, y en Asturias tenemos a López Otín. Que haya una persona de esta envergadura crea una corriente de pensamiento que empuja a los jóvenes a caminar hacia la investigación. Sin investigación se cae en la mediocridad, es absolutamente necesaria.

Compartir el artículo

stats