Los hermanos José y David Muñoz, componentes de Estopa, hicieron temblar ayer el polideportivo del Quirinal, que congregó a alrededor de 3.000 seguidores en el primer concierto del grupo en Avilés tras 14 años y único en Asturias de su actual gira. El dúo salpicó su repertorio con temas de "Rumbo a lo desconocido", su último trabajo, y entonó algunas de sus canciones más clásicas, como "Por la raja de tu falda" o "Paseo". Los artistas salieron con 20 minutos de retraso de una lavadora gigante y tras una gran pantalla con un mapa de la ciudad. Y llevaron el delirio al arrancar con su canción "Cacho a cacho", un himno para sus fans.

El momento más íntimo de la noche llegó cuando los catalanes se quedaron solos en el escenario, sin la compañía de la banda, para tocar algunos temas en formato acústico. Eloy Vecino llevaba semanas esperando este encuentro. "Me regalaron la entrada para el concierto por mi cumpleaños. Soy fan de Estopa desde siempre, los descubrí gracias a mi hermano mayor. Este concierto es el momento más importante de mi verano", afirmaba. Para entrar a El Quirinal hubo colas dos horas antes de que empezara el espectáculo.