Los cacos han vuelto a hacer de las suyas en Soto del Barco. Tras la quema de coches registradas en las últimas semanas, ahora son los hosteleros los que están en alerta. Y es que en los últimos días dos bares de la capital del concejo han sufrido robos por importes superiores a los 2.000 euros en cada una de ellos. "Estamos desesperados, ya no sabemos a quién recurrir", aseguró Rubén Gutiérrez, propietario de la cafetería Belcris, que fue asaltada la madrugada del jueves al viernes. "Me rompieron la luna y se llevaron la caja registradora, con el dinero que había dentro y la recaudación de las tragaperras. En total unos 2.000 euros", explicó el hostelero a quien, el pasado 28 de julio, unos vándalos quemaron el coche cuando lo tenía aparcado en el barrio de Rubines, y que asegura haber sufrido "una decena de robos en las últimas tres décadas". "He ido a hablar con el Alcalde, con la Guardia Civil... Pero no hay manera de poner freno a esta situación", agregó apesadumbrado el empresario.

La madrugada del miércoles al jueves el damnificado fue Guillermo González, de la sidrería Ca' Lolo. "Me cortaron la verja de la puerta y se llevaron la recaudación de las tragaperras, en la que podía haber unos 1.800 euros", afirmó el hostelero, a quien los ladrones ya han "visitado" en más de una ocasión. "El último robo lo sufrí a comienzos de este año. Ya calculo que me volverá a tocar sobre diciembre", aseveró indignado, ante la falta de seguridad que se vive en el concejo. "Da igual que pongas denuncias o lo que hagas. Si no los cogen con las manos en la masa no hay nada que hacer", sentenció.