Los 21 establecimientos que han aprovechado el escaparate de la IX edición de la Feria de Stock de Corvera, que se celebro este fin de semana, capean el temporal como pueden. La mayoría de los puestos son de ropa y la temporada no ha sido la mejor, ya que "el verano entró tarde y se va pronto", como explica Alba Novoa, una de las dependientas de la feria.

El salón corverano de septiembre siempre les da la posibilidad de sacar género y de adelantar las novedades de la temporada de invierno, con oportunidades para que el público se lleve a casa algún chollo, un "quid pro quo" que siempre tiene mucho éxito. En esta ocasión, la actividad no consiguió récord de visitantes, pero sí hubo momentos en el fin de semana en los que el ambiente en la carpa de la plaza de Los Maestros invitaba a los transeúntes a entrar. "Es una suerte que podamos poner la entrada gratuita. Los clientes miran, salen, entran, vuelven al día siguiente y además compran. Los dos días al final de la tarde, tuvimos mucha gente", afirma Mar Serrano, presidenta de la Asociación de Autónomos para la Promoción y Mejora del Comercio en Corvera (Apymec), que organiza la actividad.

"La verdad es que es de valorar el esfuerzo que hacen en una asociación relativamente pequeña. Vengo de fuera y normalmente estas ferias las organiza un ente privado. Sé que da trabajo, así que hay que valorar estas ideas que tienen para dinamizar el comercio", sostiene uno de los dueños de un establecimiento de moda, que lamentó que hubiera menos gente que en otras ocasiones, ya que no suele faltar a la cita corverana.

Ana Iglesias Villamil, una de la clientas que pasaron por la feria, señala: "Me gustaría que viniera más gente para que no se deje de celebrar. En esta feria hay cosas muy guapas, que no están anticuadas ni mucho menos y a buenos precios. Siempre que vengo me doy tres o cuatro vueltas y compro algo". Mercedes Hevia, otra de las visitantes, llegó ayer por la tarde por primera vez a la carpa y nada más entrar ya se encontró de bruces con lo que buscaba: "Acabamos de entrar y aquí estamos. Hay que comprar ropa para los niños, que empiezan la escuela", comentó.

En la Feria de Stock no solo hay sitio para artículos de ropa. Por ejemplo, Xicu Mata, de Asturcón, se estrenaba como expositor del salón en un sector diferente, el de la seguridad. "Nosotros vendemos más servicio que otra cosa. Es raro vernos aquí, pero es una forma de darnos a conocer. La verdad es que la gente se ha interesado mucho", explica el joven empresario. Lo mismo le ocurre a los integrantes de la asociación "Corvera Felina", que no faltan nunca a la actividad de Apymec. "Lo que hacemos nosotros es un mercadillo con cosas que nos donan y sacamos un poquito de dinero para seguir ayudando a los gatos abandonados", señalan.