La elaboración de una ley integral de carácter estatal contra la trata de seres humanos es la principal reivindicación del Día Internacional contra la Explotación Sexual y la Trata de Mujeres Niños y Niñas que se celebró ayer en Avilés con la lectura de un manifiesto y actividades de sensibilización. El perfil de la víctima de trata responde a mujer rumana entre 23 y 32 años, procedente de un entorno desfavorecido y captada habitualmente por el enamoramiento de una persona de su entorno, explicó el jefe del Grupo I de la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras, Santiago García Gutiérrez, uno de los integrantes de la mesa redonda sobre la explotación sexual y el tráfico de mujeres que se desarrolló en el palacio de Valdecarzana.
La Asociación para la Prevención, Reinserción y Atención de la Mujer Prostituida (Apramp) subrayó la necesidad de "hacer visible la que es quizá la forma de esclavitud más cercana a la ciudadanía española y que, sin embargo, resulta invisible, como es la trata con fines de explotación sexual, que afecta a miles de mujeres y niñas en España".
En la lectura del manifiesto, que tuvo lugar a mediodía en la plaza de España, se subrayó que es imprescindible que los menores que son víctimas de trata sean derivados a recursos especializados que cuenten con programas específicos y que procuren su seguridad, protección, recuperación e integración social. "Es muy importante identificar a las víctimas y diferenciarlas de las mujeres inmigrantes en situación irregular para evitar la revictimización", subrayaron desde Apramp.
En este sentido, García Gutiérrez remarcó la distinción entre prostitución y trata y reconoció que las fuerzas de seguridad se encuentran con limitaciones a la hora de dar con estas redes delictivas: "La prostitución se ha desplazado en los últimos años de los clubes de alterne a los pisos de contactos o casas de citas, precisamente para evitar la intervención policial", dijo. Según García Gutiérrez, el 50% de las víctimas de trata en España están en el país en situación legal.
