"Permite a cualquier médico conocer el estado de salud de su paciente, independientemente de la comunidad autónoma en la que se encuentre". Con estas sencillas palabras definió la historia clínica electrónica el doctor Sergio Gallego. Una tecnología sobre la que ofreció ayer una conferencia en el salón de actos del Hospital San Agustín, y que, dijo, entre sus virtudes también está "ofrecer mayores garantías de seguridad" para el paciente y "evitar duplicidad de pruebas".

Implantada en Asturias "desde hace dos años", esta tecnología que, según Gallego, "no supone más cambio que pasar del papel al soporte digital", beneficia, a ojos del doctor, "sobre todo al paciente". "Los datos de una persona se encuentra de viaje fuera de su comunidad autónoma y requiere los cuidados de un facultativo son accesibles en todo momento", afirmó el ponente sobre el servicio "que ya está funcionando a pleno rendimiento en España".

Pero además de mejorar la comunicación entre los diferentes servicios sanitarios del país, este sistema también ayuda a enriquecer el intercambio de archivos entre los centros de una misma comunidad. "Ahora, desde el centro de salud un médico también puede conocer los resultados de una prueba de su hospital de referencia, lo que también supone un gran avance", argumentó Gallego.

Aunque la comunicación de datos entre comunidades autónomas es una tecnología moderna, utilizar el soporte digital para almacenar las historias clínicas no lo es tanto en Asturias. "Aquí se viene trabajando con el formato electrónico desde hace décadas, aunque esta interconexión, que supone la culminación del servicio, es más moderna", relató.

Pese a los años de experiencia con los que cuenta el servicio sanitario asturiano en materia electrónica, el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) vivió en junio de 2014 numerosos episodios de colapso y quejas del personal por el programa informático utilizado para gestionar, entre otras cosas, los historiales médicos de los pacientes, el llamado "Millenium"; algo a lo que Gallego resta importancia. "Lo que pasó en el HUCA es normal. Es una plataforma totalmente compatible con el servicio de historia clínica electrónica, que funciona sin problemas. Los fallos en los comienzos son totalmente normales. Es lo que le pasaría a cualquiera en caso de tener que enfrentarse a un nuevo programa informático", excusó.