Las vallas que rodean la obra de la nueva biblioteca de Piedras Blancas -iniciada hace seis años y parada desde hace cinco- amanecieron ayer "decoradas" con libros colgados, pancartas caseras y el convenio que el Principado (gobernado entonces por el PSOE) y el Ayuntamiento (con gobierno de coalición de IU y PSOE) firmaron en 2010 para la construcción del edificio. A la iniciativa de colgar los libros en protesta por el retraso de las obras se sumaron de tarde una docena de miembros de IU. Concejales y militantes de la coalición se citaron en la zona para reclamar al Principado la reanudación de las obras.

La nueva biblioteca de Piedras Blancas se comenzó a construir en 2010 en la parcela de propiedad municipal que había ocupado la plaza de abastos. El proyecto, cuyo coste inicial superaba los 1,4 millones, estaba incluido en el plan "A" que promovió el Gobierno regional para el apoyo del empleo y la mejora de las infraestructuras locales. Las obras deberían haber concluido en 2011, pero en noviembre de ese año las paralizó el entonces Gobierno regional de Foro. Después, la primera empresa adjudicataria renunció al proyecto. A finales de 2014, el Ejecutivo regional socialista volvió a adjudicar la construcción con un plazo de seis meses improrrogables para concluir la obra del edificio. Los trabajos se reanudaron en enero de 2015 pero, transcurridos seis meses apenas habían avanzado y la Consejería de Cultura rescindió el contrato a la segunda adjudicataria. El Principado tiene previsto volver a sacar a licitación el proyecto en unas semanas.