El gobierno local está en camino de conseguir un amplio consenso en la aprobación de las ordenanzas fiscales que regirán el año que viene. La concejala de Hacienda, Raquel Ruiz, y el responsable de Promoción Económica, Manuel Campa, han ido recogiendo y asumiendo buena parte de las iniciativas que les trasladaban los grupos de la oposición y están avanzadas las negociaciones con el PP, IU, Ciudadanos y Ganemos. Y, en un punto más estancadas, las iniciadas con Somos.

La "fumata blanca" con el grupo mayoritario de la oposición, con quien el PSOE también acordó la fiscalidad el año pasado, permitiría convertir Avilés en el único municipio asturiano que pone en marcha "la plusvalía social". Esto es, bonificar a los herederos de los inmuebles, si son su vivienda habitual, con hasta el 95 por ciento en función de sus ingresos y no del valor catastral de la vivienda, como proponía en un primer momento el PSOE. Esa bonificación sería progresiva. "De la plusvalía no se libra nadie y es injusto para aquellas personas que tienen ingresos bajos. Había que corregirlo y ser así pioneros en Asturias", aseguró ayer Alfonso Araújo, concejal del PP, que se mostró satisfecho con el principio de acuerdo acuerdo.

Eso sí, Ana Bretón, portavoz adjunta del PP, quiso dejar claro que aún no hay ningún acuerdo con el PSOE, ya que eso tiene que decidirlo la junta local en una reunión que aún no ha sido convocada. Y es que las aguas bajan revueltas en la casa popular. "Aún no tenemos ningún acuerdo, eso tiene que decirlo el portavoz o yo, que soy la portavoz adjunta. Y el acuerdo no se aceptará si hay alguna discrepancia con las directrices regionales del PP", puntualizó.

Bretón se refirió concretamente a una nueva directiva del PP asturiano que insta a modificar en los municipios la ordenanza reguladora del impuesto sobre el incremento de valor de los terrenos de naturaleza urbana, la "plusvalía municipal", para que este impuesto se pague, exclusivamente, en aquellos casos en que ha existido incremento del valor del objeto de la transmisión.

Respecto al Impuesto de Construcciones, el gobierno local está dispuesto a aceptar otra propuesta del PP: dar ayudas a aquellas personas que realicen obras que tengan por finalidad la eficiencia energética. El planteamiento final difiere un poco del que puso encima de la mesa el PP, ya que esa bonificación del 50 por ciento en vez de hacerse vía impuesto será a través del presupuesto, con una nueva línea de ayudas.

El gobierno también aceptó la idea del PP de crear una tarjeta para que los usuarios de las plazas de residentes de la ORA puedan abonar el estacionamiento de forma mensual. "La idea es, además, implantar medios telemáticos para pagar desde el móvil el ticket de la zona azul, pero en los parquímetros actuales es imposible aplicar esa tecnología. El objetivo es implantarlo en un futuro", comentó Araújo. El PP también proponía incorporar mejoras en la tasa del agua para bonificar a aquellos comercios que no tengan un uso intensivo. "El gobierno reconoce que la tarifa es mejorable. Nos pidió un margen para realizar un estudio y ver qué epígrafes se podrían bonificar", explicó el concejal del PP.

En el caso del Impuesto de Bienes Inmuebles, ambos partidos están dispuestos a ceder en sus posiciones. El PP proponía compensar el tipo del IBI para que los vecinos pagaran el mismo recibo que este año; el gobierno, bajarlo hasta el 0,0715 para que subiera el 3,6 por ciento y no el 6,8 por ciento si se dejara como corresponde por la revisión catastral. Al final, un término medio: se queda en el 0,071 y el incremento del recibo será en torno a un 2 por ciento, según Araújo. El edil valoró el interés del gobierno por llegar a acuerdos, y más después de experiencias pasadas. "No sé si a base de golpes van comprendiendo la situación. La matemática del Pleno es la que es y los ciudadanos quieren pluralidad y acuerdos".

En el caso de Ciudadanos, su portavoz Carmen Pérez Soberón destacó el "clima de diálogo" y mostró su satisfacción por el acuerdo obtenido. Entre las propuestas que ha conseguido sacar adelante está el bonificar los vehículos eléctricos en la "viñeta" y, en el caso del ICIO, una rebaja del 15 por ciento para aquellas instalaciones que generasen nueva actividad económica. Respecto a la ORA, Soberón mantiene que la ordenanza necesita "una total revisión que permita un pago más dinámico y que sea más cómodo y ágil para el ciudadano". "Desde el gobierno hay clara voluntad para ello", aseguró.

"Desde Ciudadanos siempre mantenemos una actitud dialogante y constructiva y estamos contentos con estos acuerdos, que nos permiten llegar a nuestro objetivo claro de ir construyendo ciudad" concluyó Carmen Pérez Soberón.