La exportación de secciones para ingenios eólicos supone ya más del 40 por ciento de los tráficos de los muelles de Valliniello. En lo que va de año (con datos hasta el 31 de agosto) han pasado por esta zona de ampliación portuaria 177.762 toneladas de mercancías, de las que 73.829 corresponde a eólicos, la mayor cifra de exportación del lustro. El movimiento de piezas de ingeniería de alto valor añadido evoluciona al alza y la Autoridad Portuaria prevé alcanzar este año las 115.000 toneladas de exportación, superando así la marca de las cien mil que se habían planteado sus gestores hace dos años.
"Las empresas que utilizan la margen derecha como plataforma marítima (Asturfeito, Hierros Cantón, Idesa, Tadarsa, Talleres Gozón) siguen utilizando habitualmente nuestros muelles porque les suponen un alto valor logístico para sus proyectos. Son empresas muy dinámicas, con una amplia cartera de mercados exteriores que tienen en el puerto un excelente aliado por nuestra flexibilidad respecto a sus necesidades", explica el presidente de la Autoridad Portuaria, Santiago Rodríguez Vega.
Los muelles de la margen derecha comenzaron a funcionar en 2012, año en el que se movieron 280.105 toneladas de mercancías. Pero entonces más de la mitad de esos tráficos procedieron del movimiento de chatarra y carbón coque de Arcelor-Mittal. El ejercicio de mayor movimiento en Valliniello fue 2013, con 350.877 toneladas. Por tráficos, ese año se movieron 209.334 toneladas de chatarra, 62.383 de piezas de ingeniería, 36.892 de productos siderúrgicos de Arcelor-Mittal y 25.594 de coque, un producto cuyas exportaciones han caído a cero desde que la multinacional consume todo lo que produce en la propia región.
Este último año (con datos a 31 de agosto), la exportación de piezas de alto valor añadido fabricadas en empresas del entorno (la mayoría del Grupo Daniel Alonso) suponen ya cerca de la mitad de los tráficos de estos nuevos muelles. Hasta el 31 de agosto atracaron en Valliniello 109 buques (el 78 por ciento para cargas mercancía de exportación). Por tipos de producto, se movieron 74.723 toneladas de piezas de ingeniería, 45.540 de productos siderúrgicos y 27.893 de chatarra. La ampliación de Valliniello genera, medido en toneladas, el 6 por ciento de los tráficos totales del Puerto de Avilés.
"Nuestras previsiones pasan por cerrar el año en curso con unos tráficos en la margen derecha de 250.000 toneladas, en la misma línea que el año pasado (entonces fueron 258.647). En cuanto a maquinaria y piezas eólicas, la cifra estará en torno a las 115.000 toneladas, superior a las 94.000 del pasado ejercicio", apunta Rodríguez Vega. En cuanto al tráfico de coque, ha desaparecido del puerto avilesino, puesto que el que fabrica Arcelor-Mittal se consume en las instalaciones asturianas.
Según los planes portuarios, estos nuevos muelles de la margen derecha de la ría avilesina quedarán conectados mediante un ramal ferroviario con Arcelor, una infraestructura por valor de 3,6 millones de euros cuyas obras se hallan parada desde hace meses por problemas de compatibilidad de los sistemas de seguridad del nuevo ramal con el tendido de ferrocarril ya existente al que ha de conectarse.
Los muelles de Valliniello tienen un kilómetro de longitud y 14 metros de calado, una profundidad conseguida gracias a la realización de sucesivos dragados. La explanada disponible totaliza 175.000 metros cuadrados, que se dedican a área de almacenamiento temporal de la mercancía desembarcada o lista para embarcar. La instalación permite operar a buques de hasta 72.000 toneladas de peso muerto.
Para el presidente de la Autoridad Portuaria de Avilés, el balance de los muelles de la margen derecha "es satisfactorio". "Están plenamente ocupados y con un nivel de ocupación muy grande, que hace que sean rentables tanto para el Puerto como para las industrias asentadas en la zona", concluye Rodríguez Vega.
