La revolución de octubre de 1934 en Asturias ha sido analizada por no pocos historiadores e investigadores por varios motivos, uno de ellos porque se trata de la última revuelta obrera en Europa. La asociación "La Trókola" también ha hecho sus investigación sobre los sucesos en Avilés y, para ello, ha empleado tres libros de la época que resultan "fundamentales" para comprender ese proceso histórico. Carlos García Rubio ha analizado concienzudamente para esclarecer las andanzas de los huelguistas. "Son escritos hechos por participantes directos en la revolución avilesina", explica. A continuación, enumera los ejemplares: "Campaña militar de Asturias en Octubre de 1934", del general López Ochoa; "Avilés en el movimiento revolucionario de Asturias", de Julián Orbón; y "Sangre de Octubre", de Maximiliano Álvarez.

Eduardo López Ochoa fue general del ejercito de la República que entra en Avilés. Su trabajo es un diario de campaña en Asturias. "Cuando narra su entrada en Avilés relata las trincheras junto a los almacenes de Balsera y cómo detuvo a más de ochenta revolucionarios en la avenida de Los Telares, junto a la estación de tren", indica García Rubio, que tras analizar "Campaña militar de Asturias en Octubre de 1934" le llama la atención que los huelguistas carecían de armas ni opusieron resistencia al ver entrar a las fuerzas militares. Tras una serie de tiroteos posteriores, López Ochoa "liberó" el Ayuntamiento.

Julian Orbón, fue director y propietario del desaparecido periódico "El Progreso de Asturias". "Durante años lanzó editoriales y artículos contra el movimiento obrero y durante la revolución su casa y el taller del periódico fueron incendiados", relata García Rubio, que recuerda que el libro de Julián Orbón narra los sucesos en Avilés durante aquel mes de octubre "desde un punto de vista reaccionario" además de relatar su huida por los tejados de la plaza de abastos para posteriormente cruzar hasta Las Meanas y refugiarse en uno de los chalés de la calle Fernández Balsera, hoy desaparecidos.

El tercer y último ejemplar "fundamental" es "Sangre de octubre", del militante del Partido Comunista (PC) Maximiliano Álvarez. "Resultan interesantes los debates entre comunistas y socialistas sobre si era el momento propicio para la revolución o no", relata el investigador, que recuerda el reparto de pistolas en el parque del Muelle para los revolucionarios así como alguna que otra frase atribuida al líder soviético Lenin: "Un día de revolución enseña más al proletariado que un millar de libros". Para esclarecer aquellos hechos, "La Trókola" organiza hoy tarde una charla en el Palacio de Valdecarzana a las 19.00 y el domingo tiene preparado una ruta por los escenarios de la revolución en Avilés.