La multinacional Arcelor, que tendrá listas las nuevas baterías de coque en Gijón en tres años, acaba de anunciar que no tiene intención de "acometer reformas" en la coquería de Avilés. Una declaración que ha sembrado inquietud entre su plantilla. A ella se suma ahora el personal de la industria auxiliar. "Queremos mostrar nuestra preocupación y a la vez nuestra exigencia, que de igual manera que se manifiesta el compromiso de garantía de empleo para el personal de la principal, se haga lo propio con los más de 300 trabajadores de las empresas auxiliares que desarrollan su labor en esa instalación", aseguró Antonio Lueje, responsable de CC OO en las subcontratas.

El modo en que tradicionalmente se ha organizado el negocio de la producción de carbón coquizado pone a ambos lados de la balanza a los propios productores, pero también a los responsables de mantenimiento. Las baterías de Avilés tienen los días contados -empezaron a contar hace medio siglo- y los trabajadores sienten el aliento en la nuca de un futuro que es una incógnita.

Comisiones Obreras -el sindicato mayoritario en el sector metalmecánico- aseguró ayer que trabajará para que todo el personal destinado en la coquería avilesina "tenga la seguridad" de que será trasladado a Gijón. Y es que, advierten, "defendemos la necesidad de contar con estas instalaciones" porque, a juicio de la organización, permiten "el mantenimiento en Asturias de la industria siderúrgica integral", esto es, la que va desde la transformación de hierro en arrabio a las fabricación de bobinas de hojalata.

Al hilo de esto reconoció, sin embargo, que estas refinerías de carbón se encuentran en el punto de mira ambiental. Por eso, anuncian, estarán vigilantes para que haya "un estricto cumplimiento" de estas normas. A Lueje también le parece fundamental que se cumplan "las medidas de seguridad necesarias y se hagan las oportunas reparaciones para que en ningún momento se pongan en riesgo la seguridad y la salud de las personas que en ellas prestan servicio". Arcelor cuenta con algo menos de 1.500 trabajadores auxiliares en sus instalaciones.