La subasta en la que se distribuirán los bonus eléctricos de 2017 para la industria se desarrolla desde esta mañana en Madrid. La multinacional Alcoa ha conseguido llevarse cinco lotes de noventa megavatios para sus tres factorías (Avilés, La Coruña y San Ciprián), según las fuentes consultadas.

En las puertas del recinto ferial Ifema, donde se desarrollan las pujas, se concentraron sindicalistas de la USO, que emitieron un manifiesto "por una reducción de la tarifa energética para las empresas electro intensivas", como Alcoa, Asturiana de Zinc (Azsa) o Arcelor-Mittal.

"Para incrementar y fortalecer la industria española resulta imprescindible disponer de un sistema energético que permita a los centros industriales españoles competir en el mercado europeo en plano de igualdad en coste energético. Desde la Federación de Industria de la USO defendemos el impulso de un 'plan renove' de las instalaciones de cogeneración y residuos", recoge el comunicado emitido por la central.

El sindicato, como el resto de centrales, urge "modificar el sistema de interrumpiblidad". Y entre las medidas que plantea se encuentra "ampliar los periodos de las subastas hasta cuatro años, con posibilidad de una prórroga máxima de dos años más".

Con la reforma energética, el Gobierno creó un sistema de subastas para repartir entre las industrias el llamado servicio de interrumpibilidad, por el que los grandes consumidores de electricidad reciben un incentivo por modular su consumo en momentos de saturación en el sistema eléctrico.

La primera subasta, celebrada a finales del 2014, generó críticas de varias empresas, especialmente de Alcoa, que amenazó con el cierre de las factorías de Avilés y La Coruña si no obtenía un precio competitivo para la electricidad.

El presidente del comité de empresa de Alcoa Avilés, José Manuel Gómez de la Uz (CC OO), ha expresado esta mañana su confianza en que la fábrica pueda acceder a uno de los diez bloques de 90 megavatios (MW) que se subastan esta semana en el mercado del servicio de interrumpibilidad. "Tenemos una sensación positiva, ya que si hay las mismas empresas que el año anterior, hay más bloques disponibles y tendremos más capacidad; otra cosa es que se hayan certificado más empresas de las que pensamos, entonces podríamos quedar igual o peor, habrá que esperar", ha indicado Gómez de la Uz.

El objetivo es que Alcoa Avilés consiga un bloque de 90 MW, pero el presidente del comité de empresa ha advertido de que la fábrica funciona a una capacidad del 60 por ciento y el consumo es del doble. "De todos modos, con esos 90 megavatios podríamos ser más rentables de lo que somos, hablamos de ese bloque porque hasta ahora nunca tuvimos nada, pero eso no quiere decir que sea nuestro consumo total", ha puntualizado.