La piscina climatizada de Antromero (Gozón) es el símbolo de la Mancomunidad del Cabo Peñas por dos principales motivos: porque fue el motor que unió a los concejos de Carreño y Gozón para compartir servicios y también debido a su gran afluencia de usuarios. Este centro deportivo ubicado en Bocines (Gozón) y colindante con la parroquia carreñense de Candás mantiene un nivel de usuarios que ronda las 3.000 personas, cursillistas incluidos, desde que comenzó a despuntar este servicio en 2010, cuando vio aumentado el número de usuarios en 800 personas con respecto a 2009. Cabe destacar que la población de ambos concejos ronda los 20.000 habitantes por lo que el 15 por ciento de los vecinos de la mancomunidad utiliza este servicio.

Hasta la fecha, el año que más visitantes registró fue 2011 con 3.245 personas. Esa cifra ha descendido en los años posteriores, sin embargo se ha mantenido una constante que prevé rozar los tres millares de usuarios a final de 2016.

Según los datos aportados por la mancomunidad, sobre todo en los tres últimos años la piscina climatizada de Antromero ha mantenido una constante con respecto al número de visitantes. La cifra de los 3.000 cursillistas está siempre presente, algo impensable hace diez años cuando apenas se superaban los 2.000 usuarios, principalmente, de los concejos de Carreño y de Gozón.

La oferta de cursillos del centro abarca todas las edades desde los bebés hasta los mayores de 65 años. Mientras esa actividad se desarrolla, la piscina siempre tiene calles libres para que las personas que desean nadar tengan un espacio para hacerlo. A esa ventaja se suma el precio, "uno de los más baratos de Asturias", afirma un usuario momentos antes de nadar unos largos. La entrada individual cuesta 1,35 euros para menores de 14 y mayores de 65, precio que alcanza los 2,55 euros para adultos. Eso sí, los abonados pagan 10,20 euros mensuales y los menores de 14 y mayores de 65 años, la mitad.

Entre tanto, los cursillistas nadan y aprenden a flotar en una instalación que cuenta con un aparcamiento gratuito "que también ayuda". Además, desde que el centro deportivo abrió sus puertas, ha albergado numerosas actividades vinculadas con ambos concejos de la mancomunidad, sobre todo, con los centros escolares de Luanco y Candás y también como un centro "casi oficial" de las pruebas vinculadas con el Servicio de emergencias y los Bomberos de Asturias. "La piscina de la mancomunidad funciona, es un lujo y sus cursillos también", comentó el padre de uno de los cursillistas.