Convertir Avilés en ciudad "estratégica" para el emprendimiento, sobre todo relacionado con la industria y la tecnología, y conseguir, además, que esas nuevas empresas se consoliden y se queden en la villa a través de incentivos. Esos son los objetivos principales del Plan de Emprendimiento de Avilés 2020, que tiene entre sus ejes la apertura de una "incubadora" de startups de base tecnológica, el dar incentivos para empresas de base tecnológica industrial a través de la cooperación institucional y ofertar formación en capacidades integrales para emprender, además de poner las bases para facilitar la competitividad y la expansión de esos negocios. Todo ello, en una ciudad que tiene que llegar a ser un "escaparate para posicionar una nueva marca, atraer y retener talento" y, además, acompañado de la puesta en marcha del parque científico-tecnológico "Avilés Isla de la Innovación".

El concejal de Promoción Económica, Manuel Campa, presentó ayer el plan tanto a los grupos políticos como a un grupo de empresarios asentados en La Curtidora para que también participen en su elaboración aportando propuestas. El encargado de dar las claves del proyecto fue Javier García, gerente del Instituto Cíes, a quien el Ayuntamiento ha encomendado la asistencia técnica. "Éste tiene que ser un plan que se pueda ejecutar y por esto tenemos que diagnosticarnos como ciudad y tener claros los pilares para el emprendimiento en Avilés. Eso sí, esto no es un plan cerrado sino que se pueden cambiar cosas si no funcionan", comentó.

El gerente del Instituto Cíes reconoció que emprender es un camino "complejo", en el que hay "altos y bajos" que hay que tener en cuenta a la hora de abordar un plan. "Esto va de sudar la camiseta. Hay territorios con capacidad para absorber conocimiento y es importante ligar el conocimiento a todo lo que se pueda hacer desde una perspectiva de ciudad (industria, cultura, tecnología, urbanismo...). Los territorio creativos requieren de perspectiva colaboradora, especializada en buscar fortalezas, redes de networking, en encontrar gente dispuesta a invertir, crear el ecosistema como un mecanismo imprescindible", subrayó García.

Como punto de partida, el plan establece seis ejes estratégicos. El primero, instrumentos de apoyo para el fomento de empresas industriales, tecnología y servicios avanzados. Incluye acciones como la consolidación de la marca Avilés a través del parque científico-tecnológico; la creación de una agenda de innovación y la tecnología, la cooperación institucional para el asentamiento y consolidación de empresas de base tecnológica o la puesta en marcha de "Avilés 4.0 en red". El segundo eje son los instrumentos financieros para el fomento del emprendimiento y se marca como objetivos facilitar el acceso a garantías (avales) o capital de riesgo público, acuerdos con entidades financieras, incentivos para empresas de base tecnológica industrial o una red de cooperación con fondos de inversión de capital riesgo. "Una de las mayores dificultades de los emprendedores para expandirse es no contar con apoyo económico. Y esos puentes con inversores se pueden tejer", explicó García.

El tercer eje se titula "Capacitación y desarrollo de habilidades emprendedoras" e incluye, entre otros, formación en capacidades integrales, crear un máster en diseño industrial, canalizar la formación para personas mayores de 45 años -que son los que tienen más problemas de empleabilidad- o transmitir la cultura emprendedora en las escuelas. La cuarta pata es la competitividad y la consolidación de la empresa mientras que la quinta se basa en estrategias para convertir Avilés es una ciudad "para atraer y retener talento". El sexto eje se basa en la cooperación, la coordinación y la transparencia e incluye una evaluación parcial del plan cada seis meses "para plantear nuevas vías de trabajo".