"No entendemos que a estas alturas del año, con la gripe ya encima, la gerencia mantenga una planta cerrada, cuando el servicio de Urgencias está bastante saturado y el resto del hospital, lleno". Esta es la queja que plantearon ayer los delegados del Sindicato de Enfermería, el Satse, David Menéndez y Trinidad Caminero. El problema, explicaron, es que al estar las plantas a tope (excepto la mencionada planta de hospitalización de emergencias), los pacientes que pasan por Urgencias y que después de ser atendidos tienen que quedar ingresados hacen "tapón" hasta que van quedando camas libres que pueden ocupar.
A primera hora de la mañana de ayer, explicaron los delegados del Satse, había ocho ingresos pendientes de subir a planta, y a media mañana continuaban siete pendientes. "Los trabajadores están reventados, cansados, ya hasta el alma de sufrir las restricciones de no sabemos quién", aseguró Trinidad Caminero. Por eso, el sindicato reclama tanto la apertura de la planta cerrada, "en la que están haciendo alguna labor de mantenimiento que se podía haber realizado en verano", como la dotación de los medios humanos necesarios para tratar adecuadamente a los pacientes.
Primera planta
Entre el servicio de Urgencias y la hospitalización en planta hay un paso intermedio, el hospital de la primera planta con 16 camas, "pero allí las condiciones para el paciente no son las adecuadas porque no hay baños, son camas separadas con cortinas". Y además, según Caminero, el personal tiene que improvisar para atender a los pacientes, sin una planificación adecuada de materiales. "Tendrías que tener todos los medios materiales y humanos, queremos dar buena atención y tratar a la gente como es debido".
Durante el fin de semana el servicio de Urgencias estuvo a tope, con 267 y 247 pacientes. "Es muchísimo, y el personal de Urgencias todo el tiempo está reclamando enfermeras. Los pacientes están amontonados, esperando más tiempo del debido, cuando podrían abrir la planta que está cerrada y que tiene 34 camas". También el lunes -que es el peor día en Urgencias, porque es cuando más enfermos llegan-, los pacientes tuvieron que esperar bastante hasta tener una cama. En opinión de los delegados del Satse, "los pacientes no merecen ese trato por parte de la gerencia y la dirección de enfermería".
David Menéndez añadió que no es lógico que, pudiendo prever la llegada de la gripe, todos los años en el mismo mes, "sigan empeñados en ahorrar con una planta cerrada". "Que la reparen en verano, que está medio hospital vacío. Ahora Urgencias está saturadísimo, los pacientes tienen que estar esperando por una cama porque están todas ocupadas, y no hay tampoco material adecuado". Las quejas las comparte la junta de personal.
La incidencia de la gripe acaba de comenzar, y todavía no llegaron los picos más fuertes. Y lo que se teme el Satse es que entonces la saturación sea todavía mucho mayor.
