Los sindicatos mayoritarios, UGT y CC OO, y la Cámara de Comercio confían en que la propuesta del Ayuntamiento de soterrar parcialmente las vías de Avilés para salvar la barrera ferroviaria salga adelante, y más después de 20 años de espera y debates. "A ver si se ponen de acuerdo y tiramos todos en la misma dirección. Vemos bien la opción de soterrar las vías, aunque desconocemos el proyecto", aseguró ayer Francisco Menéndez, presidente cameral. El dirigente se mostró favorable al nuevo proyecto ya que "parece más factible", sobre todo económicamente, y porque "libra el centro de la ciudad del ferrocarril". Tanto Menéndez como Iñaki Malda, responsable comarcal de UGT, y José María Guzmán Pacios, su homólogo en Comisiones Obreras, esperan tener en los próximos días un encuentro con el gobierno local para que les explique de primera mano la alternativa que ya analiza el Ministerio de Fomento.

"Todo lo que sea el desarrollo urbanístico de la ciudad es perfecto, pero lo bonito es cuando se hace. Este proyecto lleva años en la agenda así que ojalá que ésta sea la vencida. Lo principal es ser pacientes y ver cómo transcurre todo eso. Si hay proyecto, bien, y si es más barato, también. Pero hay que esperar", afirmó Malda.

Pacios, por su parte, defendió que su sindicato, desde el principio, fue un "firme defensor" del soterramiento. "Este es un proyecto parecido al que ya se planteó hace más de una década y, además, nos agrada que se salve de las vías al Centro Tecnológico de Arcelor. Entendemos que esto es una demanda histórica y esperemos que no quede en humo, como el proyecto que presentó hace unos años Víctor Morlán", aseveró el secretario comarcal de CC OO.

También el PP, a través de su presidenta local, Carmen Rodríguez Maniega, valoró el plan que ahora está encima de la mesa. Sobre todo porque es similar al que su partido ya defendió hace dos décadas. "Está en juego la transformación del centro de la ciudad. Ahora, el PSOE retoma veinte años después y con más sensatez después el proyecto que ya intentó el PP", afirmó Maniega. Respecto a la viabilidad técnica, la dirigente popular afirmó que tendrán que ser los expertos los que se pronuncien. Lo que sí ve es encaje político: "Aunque tenemos que analizarlo, nos suena bien". Sobre todo, porque permitiría "dar oxígeno al parque del Muelle y a la recuperación de la muralla", además de "acercar la ciudad a la ría". La nueva alternativa, además, evita dañar el centro de investigación de Arcelor.

Carmen Rodríguez Maniega aprovechó la ocasión para solicitar que si finalmente los técnicos del Ministerio de Fomento y la Confederación Hidrográfica dan el visto bueno al plan municipal, éste "no se convierta en un proyecto de unos pocos y en un arma arrojadiza", sino que sea "del conjunto de una ciudad que lleva años esperando a modernizarse".