El poeta corverano Berto García fue el encargado de cerrar el curso de llingua que organiza el Ayuntamiento de Corvera, con un coloquio sobre su último libro "Esconderite", con varios poemas que hablan de "los lugares en los que las personas se sienten seguras y cómo, en ocasiones, la vida te saca de esa zona de confort", en palabras del propio autor. "Está teniendo muy buena acogida, se ha movido bastante", explica.

En el acto estuvo acompañado por la editora Esther García y escuchó las preguntas que llegaban desde el público. "La gente se mostró muy interesada en los pasos para crear un poema, de dónde llega la inspiración, qué te lleva a escribir. Hay interés por la poesía, la gente preguntó mucho y eso siempre es bueno", sostiene el escritor. Una de las preguntas que más le sorprendió fue sí los poetas son los filósofos de la calle: "Contesté que igual tenía razón. Un filósofo es más metafísico y los poetas nos quedamos con cosas más concretas, pero se trata de una reflexión sobre el mundo en ambos casos, aunque sea con lenguajes diferentes".

"Esconderite" no deja de ser su visión de un aspecto de la vida. "Es ese sitio en el que estás a gusto, pero de repente tienes que afrontar algo. Hay personas que salen de su escondite y plantan cara y otras que se quedan en él, o también ocasiones en las que necesitas llegar a ese lugar en el que estás tranquilo par ver las cosas más claras. De esa dicotomía de la vida habla el libro, una reflexión de como afrontas la vida y el paso del tiempo", explica el poeta. Berto García defiende que es bueno no quedarse escondido, pero hay momentos en los que es positivo tomarse un respiro. En su caso lo tiene claro: "Puedes esconderte en un libro, en un paseo, escuchando un disco...".

Este poemario es su obra más reciente, pero el escritor corverano no para: "Acabo de terminar un libro de haikus y tengo otros dos proyectos bastante avanzados, el noveno y el décimo de mi carrera". El libro de haikus es el que apunta a ser el primero en ver la luz, se trata de un tipo de poema japonés, el más antiguo que se conoce. "Es un poema de tres versos que habla de un instante, que capta una esencia, un momento", explica García.