"Llevo veinte años tocando y es la primera vez que tengo conocimiento de una reunión de este tipo; haber roto el hielo después de tanto tiempo, al menos, ya invita al optimismo". Con estas palabras, el músico Adrián Martínez ("Ritual") daba cuenta de su satisfacción tras dos horas de reunión con la concejala de Juventud de Avilés, Raquel Ruiz, que ayer escuchó las quejas y reivindicaciones de una decena de grupos, solistas y bandas locales a los que prometió poner más recursos municipales al servicio de la música "hecha en casa".

Y para muestra, sendos botones: el año que viene se estrenará un nuevo formato de festival -puede que en las fiestas de El Bollo o en las de San Agustín- en el que tocarán todos los grupos avilesinos que expresen su interés en subirse al escenario y, también durante 2017, los viernes serán días dedicados a los grupos "de casa", con un calendario de conciertos en plazas, parques y barrios para que las formaciones musicales avilesinas se luzcan y den a conocer.

La idea del festival surgió en el transcurso de la reunión mantenida ayer con los grupos y bandas previo descarte de otra propuesta que consistía en organizar un concurso para formaciones avilesinas cuyo premio sería ayuda en la promoción del ganador. Fueron los propios músicos los que hicieron ver a la concejala que el aspecto competitivo del concurso dejaría a "gente por el camino" y que si se trata de colaborar en la difusión de la música avilesina, mejor un festival o formato similar para que sirva de escaparate al conjunto.

Hasta ahí la parte "amable" de la reunión, porque el resto fue una sucesión de quejas, reproches y reivindicaciones -cierto es que expresadas en tono cordial y constructivo- de las que Raquel Ruiz tomó nota. Y es que los miembros de las bandas avilesinas tienen muchas espinas clavadas. "En Avilés se hace música de calidad a raudales pero faltan oportunidades", manifestó uno de las asistentes a la reunión. "Es increíble que en una ciudad que tiene el Niemeyer, la Factoría Cultural, media docena de polideportivos y decenas de plazas donde poder tocar se haga tan poco por los grupos locales", dejó caer otra de las invitadas al acto. "Precisamente para que eso cambie estamos aquí reunidos", replicó la concejala de Juventud dando a entender que el equipo de gobierno se ha propuesto potenciar a la cantera musical avilesina.

Entre otros asuntos de los que ocuparse "si de verdad hay interés en poner las cosas más fáciles" a las bandas y grupos, los músicos reseñaron los siguientes: habilitar locales de ensayo -a este respecto Raquel Ruiz les ofreció aulas de alquiler en la Factoría Cultural-, facilitar el acceso a los locales donde tocan los grupos -casi siempre ubicados en zonas acotadas por bolardos- para las labores de carga y descarga de los equipos, aclarar la aplicación de la normativa en materia de música en vivo para evitar las consabidas escenas de la policía parando conciertos para comprobar la documentación y reservar unas cuotas de contratación de grupos locales en actividades, festivales o conciertos que se financien con aportaciones municipales, caso de "La Mar de Ruido". Al margen de la competencia municipal, también se oyeron quejas por la pobreza de los cachés, que van desde "tocar por las cervezas" a 300 euros en el mejor de los casos "de los que una vez descontados los gastos pueden quedar limpios 50".

A la reunión asistieron miembros de los grupos "Ritual", "A ti ke te importa", "Norma", "Manitou", "Zeta 41", "Fuera de control", "Tyrant", "Mayday", "Acoustic Rules " y "Rock Rules", que quedaron en volver a verse con la concejala el día 26 de enero para seguir trabajando en la materia.