Un total de ocho empresas optan al contrato para finalizar las obras de construcción de la biblioteca de Piedras Blancas. La Consejería de Educación y Cultura sacó a licitación el proyecto por tercera vez desde 2010. El precio de la licitación es de 798.675 euros (IVA excluido) y el plazo de ejecución, de seis meses. Las obras se adjudicarán definitivamente en las próximas semanas.

La biblioteca de Piedras Blancas se comenzó a construir hace más de seis años en la parcela de propiedad municipal ubicada en la calle Alfonso I de la capital del concejo, la que antes había ocupado la plaza de abastos. El coste inicial del proyecto superaba los 1,4 millones de euros. Las obras deberían haber concluido en 2011, pero en noviembre de ese año las paralizó el entonces Gobierno regional de Foro. Poco después, la primera empresa adjudicataria renunció al contrato.

Tres años después, a finales de 2014, el Ejecutivo regional del PSOE volvió a adjudicar el contrato con un plazo de ejecución de seis meses improrrogables para concluir la obra del edificio. Los trabajos se reanudaron en enero de 2015, pero seis meses después, apenas habían avanzado y el Principado rescindió el contrato a la segunda empresa adjudicataria.

El Consejo de Gobierno del Principado aprobó el pasado mes de noviembre un gasto de 966.397 euros para concluir la construcción de la nueva Biblioteca de Piedras Blancas, que lleva cinco años de retraso sobre las previsiones iniciales para la ejecución del proyecto (arrancó hace más de seis). La partida económica se distribuyó en dos anualidades: 322.132 euros para 2016 y 644.264 euros para 2017. En la partida económica no se incluye el equipamiento de la biblioteca que, en principio, correrá a cargo del Ayuntamiento de Castrillón.

Los vecinos de la zona llevan años quejándose por la situación de la parcela que está llena de basura y de roedores y por la falta de medidas de seguridad. Hace unos años, la presión vecinal obligó al Principado a retirar una grúa que había quedado en la parcela en 2011 cuando se suspendieron los trabajos. Los residentes temían que la grúa causara algún accidente. También se cambiaron las vallas de cierre.

El edificio fue proyectado por el arquitecto Roberto Alonso. Además de la biblioteca, el inmueble contará con sala de lectura, sala de estudios, sala de lectura de prensa, zona infantil, almacén para libros y un local para fichar las novedades bibliográficas. Asimismo, contará con red wifi y área de descanso en el exterior del inmueble.