Temor en la plantilla de Alcoa por las subidas del precio de la luz. Los trabajadores de la planta avilesina ponen el grito en el cielo y advierten de las consecuencias que pueden acarrear estos vaivenes para la industria, en general, y para la electrointensiva como la aluminera, en particular. "Es una vergüenza los costes eléctricos, tanto para el consumidor como para la industria. En Alcoa estamos pagando más del doble en costes eléctricos que durante el pasado verano. De poco pueden servir mecanismos como la interrumpibilidad (el sistema ideado por el Gobierno que permite abaratar la factura eléctrica a la industria electrointensiva) si se disparan los precios de esta forma", protesta el presidente del comité de empresa de la fábrica avilesina, José Manuel Gómez de la Uz.

El sindicalista pone en tela de juicio cómo calcula el Gobierno el gasto eléctrico. "No pueden justificar los precios diciendo que el gas está subiendo el coste eléctrico porque solo el 15% del mix energético es ciclo combinado. Es lo mismo que si vas al súper, compras todo lo que necesitas para tu día a día, se te antojan percebes y compras un kilo. Es como si ese kilo de percebes te marcase el precio de todo el carro de la compra. Es inaceptable, no lo puede entender nadie", indica.

Desde el comité avilesino exigen "que el coste eléctrico sea el real y no que la energía más cara marque el precio" de la luz. "Esto es malísimo para Alcoa y si seguimos así se pondrá en riesgo cualquier industria, no solo la del aluminio. De poco sirve la interrumpibilidad para abaratar la factura si te suben el precio", añadió.

La plantilla avilesina también pide a los políticos que hagan los deberes y se pongan "de una vez" manos a la obra para buscar un sistema alternativo a la subasta de interrumpibilidad, el sistema ideado para repartir los bonus eléctricos. La última se celebró el pasado noviembre y Alcoa salió bien parada de esa última convocatoria.

"Parece que solo hay respuesta de los políticos y movimiento cuando estamos al borde del abismo, a las puertas de la subasta. Que trabajen ya, si no en unos meses estaremos en la misma situación y algún día sí que acabaremos cayendo al abismo", concluyó De la Uz.