Erradicar los plumeros de la Pampa -"Cortaderia selloana"- y otras especies invasoras, como la mimosa. Este es el ambicioso objetivo de un informe interno de la Mancomunidad Comarca Avilés, cuya puesta en marcha depende ahora de la voluntad política de los distintos concejos implicados. Supondría un bajo precio para las arcas municipales, ya que lo que este documento plantea es que los costes de erradicación vayan a cuenta de los tenedores o propietarios de las parcelas con presencia de especies invasoras; y si algún municipio tuviera que actuar de oficio, el coste se repercutiría vía tasa a los titulares de las parcelas invadidas.
La realización de este informe, que incluye una propuesta de ordenanza para su aprobación en las diferentes corporaciones locales, fue realizada a instancias de sendas peticiones de Corvera y Castrillón. En ambos concejos se aprobaron mociones presentadas por IU encaminadas a eliminar los plumeros, y en esos textos se incluía la solicitud de un informe sobre el procedimiento más adecuado para realizar dicha eliminación. Asturias -junto con Cantabria y País Vasco- constituye uno de los principales núcleos de población de esta planta invasora, y precisamente es en la comarca avilesina donde se encuentran algunos de los núcleos más significativos, en continuo avance.
En lo que se refiere a la ordenanza, afectaría no únicamente a los plumeros, sino a todas las plantas incluidas en el Catálogo Español de Especies Alóctonas Invasoras, y también a las que pudieran definirse para el Principado de Asturias por normativa propia. Según el texto de esta propuesta, todos los propietarios de fincas con especies invasoras quedarían obligados a comunicar la presencia al Ayuntamiento correspondiente o a la Mancomunidad, con identificación de la referencia catastral de los terrenos, en el plazo de seis meses tras la entrada en vigor de la ordenanza. En cuanto al plazo para que las erradiquen, es de un año.
En los casos en los que transcurran esos plazos previstos sin que la propiedad tome cartas en el asunto, la administración local podrá intervenir, pasando la tarifa correspondiente. En cuanto a las sanciones por incumplir la ordenanza van desde los 100 a los 10.000 euros, en función de la gravedad. Las infracciones leves (no comunicar la presencia de especies invasoras, así como el transporte, tráfico o comercio por particulares) podrían conllevar una multa de entre 100 y 1.000 euros. Para las infracciones graves (no erradicar las especies transcurrido el plazo establecido y transportar y comerciar estas especies en empresas o comercios abiertos al público) se prevén sanciones de entre 1.000 a 3.000 euros. Y las infracciones muy graves, por no erradicar las especies o reiterar en el comercio por empresas o comercios abiertos al público, tendrían multas de entre 3.000 y 10.000 euros.
Erradicar los ejemplares de "Cortaderia selloana" no es fácil, ya que se reproducen muy fácilmente y los ejemplares adultos pueden alcanzar los tres metros de altura, desplegar raíces en dos metros a su alrededor y profundizar con las mismas hasta los 3,5 metros. El informe de la Mancomunidad desaconseja la erradicación por corta, siega o desbroce, ya que no impiden el rebrote. Tampoco se recomienda la quema.
En cambio existen tres opciones viables para eliminarlos. Para los ejemplares más jóvenes está indicada la eliminación manual, con arranque completo de la planta, incluyendo toda la raíz. En cuanto a la eliminación mecánica sólo está aconsejada para grandes superficies (en seco) con acopio y quema inmediatamente posterior, garantizando la no dispersión de semillas con la combustión de los plumeros. Y requiere incorporar vegetación autóctona. Por último, la eliminación química es la indicada para los ejemplares adultos que no estén en las riberas de cauces o zonas húmedas y lejos también los campos de cultivo. El informe recomienda el uso de glifosato, pero utilizado con todas las cautelas pertinentes.
