La alcaldesa de Avilés, Mariví Monteserín, recibirá la próxima semana a los representantes de los trabajadores municipales, críticos con su gestión de personal. Los sindicatos están quejosos por el desaire que, a su entender, les propinó el concejal del área, Raúl Marquínez, quien se negó a acudir a una reunión convocada por ellos para pedirle explicaciones sobre la política laboral; a la que sí asistieron varios ediles de la oposición.

Tras el "desplante", la junta de personal acordó pedir una reunión urgente con Monteserín. Y no es la única medida de presión prevista, ya que los representantes sindicales también solicitaron una intervención en el Pleno, la convocatoria de una asamblea de trabajadores -piden la máxima asistencia dada la importancia de los asuntos a tratar- y acciones y presiones "que por el momento y de forma inminente serán realizadas por los delegados de los órganos de representación".

Las organizaciones sindicales presentes en los órganos de representación (Sipla, Usipa, Avanza, UGT) quieren plantear al gobierno local del PSOE sus propuestas sobre la planificación de los recursos humanos, el desarrollo de las ofertas de empleo público, la remunicipalización de los servicios públicos, la implantación de la carrera profesional, la consolidación y mantenimiento del empleo precario de los trabajadores municipales y la inclusión en la relación de puestos de trabajo de las técnicas de las Escuelas Infantiles, así como transparencia en la gestión de recursos humanos. Reprochan, asimismo, lo que consideran "falta de sensibilidad y voluntad negociadora por parte del equipo socialista".