Nuevo asalto a plena luz del día en un céntrico establecimiento. Un ladrón accedió ayer por la tarde a la farmacia situada en la esquina de González Abarca y La Cámara y, tras amenazar con un cuchillo de grandes dimensiones a la dependienta, se llevó parte de la recaudación del día.

El robo se perpetró en torno a las cuatro y media de la tarde en la transitada calle avilesina. El caco accedió al establecimiento oculto con un pasamontañas cuando en su interior había solo una trabajadora. Fuentes próximas a la investigación explicaron que el caco esgrimió un gran cuchillo nada más entrar por la puerta de la farmacia y pidió a la trabajadora que le entregara el dinero de la caja. Tras consumar el robo, el ladrón salió corriendo del establecimiento. Esta acción llega días después de que un ladrón asaltara hace apenas una semana, navaja en mano y también a media tarde, la pizzería de la calle Cuba.

La Policía también busca a otro caco que se llevó la recaudación de una peluquería del barrio del Quirinal tras acceder al establecimiento por la fuerza, rompiendo el cristal de la puerta con una tapa de alcantarilla. Como informó este periódico, el asalto se produjo en torno a las nueve de la mañana del viernes. Varios testigos vieron al hombre salir del negocio con un maletín bajo el brazo y dieron el aviso a las fuerzas de seguridad.

Horas antes se había producido un intento de robo en El Pozón. Los agentes pillaron a un avilesino cuando se disponía a asaltar una tienda de artículos de segunda mano tras romper la cristalera del establecimiento que gestiona Maribel Santos y que colabora con una asociación sin ánimo de lucro. Fue un vecino el que dio la voz de alarma. El detenido está a la espera de juicio.

La alarma también saltó en Los Telares el pasado fin de semana. Fuentes vecinales comunicaron que los cacos forzaron un garaje y se llevaron material. "No podemos seguir así", protestaron.