El camino para llegar a la completa normalización de las parejas homosexuales aún es sinuoso. Todavía hay muchos que no ven bien que personas del mismo sexo tengan una relación, lo que afecta a los afectados a la hora de hacer pública su orientación. Eso también se ve en los institutos, según el sexólogo Iván Rotella, que afirma que a los chicos les resulta "más difícil salir del armario, visibilizarse". "En los institutos está mejor visto que dos chicas sean lesbianas que el hecho de que dos chicos sean gais. Por eso, es importante tratar de educar en la diversidad", asegura el también responsable del Centro de Atención Sexual de Avilés (CASA). Rotella habla con conocimiento de causa, ya que está en contacto a diario con los jóvenes que le cuentan sus experiencias, miedos y dudas.
Una visión que matizan algunos profesores y padres, sensibilizados con este asunto y que ven en sus centros cómo las relaciones entre jóvenes del mismo sexo son algo "normalizado". "Entre los chavales están bien vistas las dos opciones. Cuando hablas con ellos no hemos notado que una cosa esté bien y la otra mal sino que lo ven dentro de la normalidad. Lo contrario sería preocupante", asegura Juan Muñiz, jefe de estudio del colegio Paula Frassinetti. El profesor comenta que los alumnos tienen "asumido que cada uno tiene sus opciones". "Nosotros sólo les decimos que tienen que ser felices consigo mismos", añade. Tampoco Mónica Huerta, presidenta del AMPA del IES La Magdalena constata esa discriminación. "La verdad es que me sorprende bastante esa afirmación. Nunca se nos ha planteado esa situación. Nosotros intentamos educar en el respeto a las personas", apunta.
El Centro de Atención Sexual de Avilés (CASA) atendió el año pasado a 2.802 personas en sus diferentes áreas de trabajo, con un perfil que se mantiene respecto a ejercicios anteriores: jóvenes de entre 16 a 19 años, aunque han constatado un aumento significativo de las consultas realizadas por personas y parejas mayores de 25 años.
"2016 fue un año de consolidación y estabilidad, que ya es todo un éxito tras diez años", afirmó Rotella, acompañado de la concejala de Juventud, Raquel Ruiz. Las consultas de los jóvenes dependen de sus edades, según el sexólogo. Así, entre los 14 y 17 años suelen preguntar sobre anticonceptivos, primera veces, dudas sobre su sexualidad... mientras que los mayores abundan más en temas de pareja, "inquietudes más profundas".
"Las consultas han cambiado en estos años y sobre todo porque estamos viendo que la educación sexual de los chicos, en la actualidad, es desde la pornografía; es la educación sexual del siglo XXI. Se creen lo que ven y hay que aclararles muchas cosas", afirmó Rotella. También las redes sociales se han colado entre las cuestiones a tratar por los sexólogos, sobre todo los problemas legales a la hora de compartir fotografías. "Intentamos tratar el sexting (envío de contenidos de tipo sexual) de forma positiva y segura porque sino es un delito, y eso es algo que nadie se lo explica", comentó.
Uno de los proyectos de CASA es "Diversex", que se inició hace unos dos años con la intención de ayudar a jóvenes con dificultades relativas a su identidad sexual. "Comenzó como una experiencia piloto y ahora contamos con 12 chicas que ya dieron el paso de conocerse y quieren visibilizar sus vivencias y atraer a más chicos que puedan tener sus mismos problemas", explicó Rotella. Respecto a que los chicos no acudan a ese proyectos, el sexólogo no tiene explicación, aunque lo justifica en que "las chicas maduran antes".
La principal labor del Centro de Atención Sexual se ha realizado en los centros educativos, con el programa "Aprendiendo a entendernos", que ya está consolidado en los institutos. Ahora van a dar un paso más y la formación sexual también se va a dar en los módulos de Formación Profesional Básica y Estética y Peluquería del Centro Integrado de Formación Profesional Avilés.
En la comparecencia también se abordó el cartel del 8 de Marzo, "Supermujeres", que fue retirado por polémico. Rotella no lo considera "machista, sino confuso". Tanto la concejala como una técnico municipal del área de Juventud salieron al paso de la acusación de Somos Avilés, que denunció hace unas semanas que el premio del concurso se había dado "a dedo". "Están acusando a los técnicos que participaron en la comisión de valoración de prevaricar y eso me parece muy fuerte", afirmó la trabajadora. Ruiz secundó la crítica y dijo: "Han intentado poner en entredicho a los técnicos y ensuciar un proceso puro y transparente por una cuestión de ideas. Nos descentramos del objetivo final, que es la lucha de las mujeres".
