José Antonio Amago, fundador de la empres familiar avilesina Pozo Amago, falleció anoche a los 68 años en el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) tras luchar durante dos años contra la Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA). El empresario avilesino, muy conocido por sus labores sociales pese a que las ejerció de forma callada y anónima junto a su esposa Pilar del Pozo, ha donado su cerebro para la investigación.

El empresario logró reflotar junto sus hijos en los últimos años Pozo Amago, el negocio de andamios que forjó a finales de los años ochenta y que se derrumbó con la crisis. "Ha sido muy duro tanto a nivel empresarial como personal; como todos los sectores, nos hemos tenido que reinventar", señaló recientemente a este periódico su hija Mónica Amago. Y en todo este proceso, pese a la enfermedad, participó su padre José Antonio Amago, que a pesar de las limitaciones físicas por la ELA siguió acudiendo a las instalaciones de la empresa familiar, en Miranda.

José Antonio y Pilar, miembros del Rotary Club de Avilés, pusieron en marcha en 1988 la empresa Pozo Amago S. L., la fusión de Electromecánicos Amago (fundada por él en 1973) y Alquileres Pilar del Pozo (impulsada por ella en 1981). Llegaron a contar con una plantilla de 140 trabajadores, instalaciones en Miranda, el parque empresarial de la ría y el polígono de Maqua y a tener sobre la mesa un ambicioso proyecto que acabó en el tintero. «Hace ocho años empezó el declive. En 2006 teníamos entre manos un proyecto para poner en marcha siete naves para la fabricación de elementos metálicos que incluía una guardería para uso de los trabajadores en Valdredo (Cudillero). Pero empezaron los problemas y en 2009 tuvimos que desechar la idea», explicaba el empresario en 2012.

Por aquel entonces la carga de trabajo de la empresa familiar ya había disminuido como consecuencia del desplome que sufrió el sector de la construcción, la firma acabó en un ERE y los Pozo Amago intentaban volver a empezar. La empresa ha resurgido tras el profundo bache.

José Antonio Amago se volcó durante estos dos últimos años en el apoyo de acciones para la investigación de la ELA y trasladó un mensaje a sus amigos más próximos antes de morir, que el dinero para coronas y ramos de flores por su fallecimiento se destine a la erradicación de la polio, a través del Fondo PolioPlus.

El funeral por José Antonio Amago se celebrará mañana, a las 16.00 horas, en la iglesia de Santo Domingo de Miranda. A continuación recibirá sepultura en el cementerio de La Carriona.