Los alumnos de tres años del colegio público Sabugo recibieron ayer la visita de Samalandrán. El monje marinero irlandés que, según la leyenda, tras vagar durante siete años por el Atlántico junto a otros religiosos encontraron el paraíso en las tranquilas aguas de la ría de Avilés, llegó al aula de los más pequeños con un gran bollo de Pascua de varios pisos coronado por una gallina de chocolate. Acudió al centro educativo de la calle González Abarca para compartir con los pequeños el dulce típico de la ciudad y celebrar la Semana Santa siguiendo la fábula, que cuenta cómo los monjes, al alcanzar lo que es la ensenada de Lloredo y la charca de Zeluán, festejaron la Pascua compartiendo unos panes.

Tras un efusivo recibimiento, Samalandrán se presentó ante su público y explicó quién era. Comentó que estaba cansado "porque llevo toda la noche remando encima de la ballena". Esta introducción dio pie a los alumnos a plantearle tímidamente una serie de dudas sobre su vida. Así, Javier Menéndez se interesó por el color de la ballena sobre la que viaja, Inés Menéndez quiso conocer el desayuno favorito del monje, Guillén Sáez le preguntó cuál era su letra preferida, María Amieva cómo era el lugar en el que vive y Omar Rhouli por qué llevaba unas redes.

Pacientemente, el singular personaje fue aclarando cada una de las dudas de los niños, que se situaron en el aula formando un semicírculo para arropar a su visitante. Tras ellos, los padres seguían atentamente y con una gran sonrisa el encuentro, dirigido y coordinador por el profesor Víctor Raúl Pintado Rey, "Vitu", autor del cuento "Samalandrán, Islla de lleendes", basado en la historia de los viajes del monje irlandés.

Durante los últimos días, educador y alumnos han estado trabajando en torno a los cuentos y leyendas para fijar la atención en la magia del mar y la popular leyenda de Samalandrán . "Partiendo de esta historia intentamos potenciar el talento individual de los niños y promover su creatividad como base para el desarrollo de un pensamiento divergente, flexible y respetuoso con las tradiciones y la cultura popular", subrayó Pintado Rey.

Para este acto, el docente solicitó la colaboración de la Asociación Cultural "Xaréu d'Ochobre", cuyos integrantes acudieron al colegio ataviados con el traje mariñán o de pescador. Arroparon en su intervención a Samalandrán -papel interpretado por Julián González, integrante del grupo- e invitaron a bailar la danza prima de la mar (adaptación del colegio Sabugo a la letra del grupo de folk "Balandrán") a niños y padres en el patio del centro. "Acudimos encantados a los colegios para mostrar y recuperar nuestras tradiciones", señaló José Federico Álvarez Palacio, uno de los componentes de "Xaréu", entidad que pronto cumplirá 30 años.

Finalizado el baile y para recuperar fuerzas, los niños saborearon los bollos de pascua que aportaron los padres un día antes y que decoraron en un taller celebrado en el colegio. Invitaron a los adultos a la degustación del dulce, que puso punto final a una mañana festiva y de leyenda.