"La Cofradía del Bollo es un ejemplo de convivencia, se preocupa de hacer el bien, de ayudar a los demás, de resolver los problemas, de alegrar la convivencia. ¡Qué alegría la de vivir esta unión! Son ya 125 años. Os felicito". Así se dirigió ayer en su homilía el párroco emérito de San Nicolás de Bari, Ángel Garralda, a los integrantes del Bollo en la tradicional misa de cofrades del Domingo de Resurrección. Las calles bulleron días atrás con las procesiones de Semana Santa pero ayer, en la misa de las once, los fieles no abarrotaron el templo. "Tenía que estar la iglesia llena, pero en fin (...). Sigue remando mar adentro la Cofradía, tan metida en la iglesia y próxima a los intereses de la parroquia", añadió Garralda, que tuvo un recuerdo para el fundador de esta fiesta centenaria, Claudio Fernández-Luanco y Riego.

El sacerdote habló del Cristo que "ha vencido a la muerte" y dijo sentir "vergüenza" de un mundo en el que "miles de personas mueren ahogadas en el mar" y en el que "Rusia dice que tiene la bomba más eficaz para matar". "¿Pero adónde vamos con tanta desvergüenza?", planteó Garralda, que también puso el foco en la ciudad. "Qué desgracia que no haya la ilusión que había, que vamos a la deriva", dijo.

Mientras en la calle San Francisco empezaban a sonar las gaitas, el párroco emérito se dirigía a los cofrades y fieles: "Que todo este fervor de la Semana Santa se vea reflejada en la vida cristiana cada día. Que tengáis felices Pascuas".