La planta de ácido sulfúrico de baterías de coque continuará cerrada en tanto no se garanticen las medidas de control necesarias para que un episodio de contaminación como el ocurrido ayer por la tarde no vuelva a repetirse. Así lo ha indicado esta mañana Elena Marañón, directora general de Control Ambiental, tras visitar a última hora de la tarde de ayer las instalaciones de Arcelor Mittal. La empresa se comprometió con el Principado a remitir esta mañana un informe completo sobre el accidente en un sensor que provocó un escape de gas ácido. La compañía ha comunicado que se produjo una emisión de trióxido de azufre.

La Fiscalía del Principado de Asturias , además, ha incoado hoy de oficio diligencias de investigación para determinar la posible responsabilidad penal en el escape de gases ácidos producida ayer en Avilés. Las diligencias de investigación, con carácter preprocesal, tendrán una duración inicial máxima de 6 meses, con posibilidad de prórroga, y su conclusión puede ser por dos vías: con la presentación de la correspondiente denuncia, si se determina la existencia de indicios de infracción penal, o con el archivo, en el caso contrario

La emisión contaminante alertó a la población, ya que muchos vecinos tuvieron problemas respiratorios. No obstante sólo cinco personas acudieron a los servicios de urgencias, según ha explicado la alcaldesa de Avilés, Mariví Monteserín: dos al San Agustín, otros dos al centro de salud del Quirinal y uno al de Llano Ponte. Además se trataba de pacientes con otro tipo de patologías, que fueron los más perjudicados por el escape de gas.

El Principado abrirá expediente a Arcelor por este accidente y valora si procede una sanción. Y si se constatara responsabilidad por insuficientes garantías de control de la planta de ácido sulfúrico, se pondrá en conocimiento de la Fiscalía. El Principado tuvo conocimiento de lo ocurrido a las 19.20 horas, momento en el que recibió un servicio de control ambiental alertando de una nube en Avilés que producía efectos irritantes en la población. "Nos trasladamos personal de la Consejería, fui yo personalmente, estuvimos en las instalaciones, visitamos la planta donde ocurrió el incidente y estuvimos valorando las causas", afirmó Marañón. Según explicó la directora general, el origen del accidente fue un fallo en una sonda que controla la adición de ácido sulfúrico de una planta que transforma el trióxido de azufre en ácido sulfúrico y por tanto se produjo un escape de gas ácido que tiene efectos bastante irritantes. Se estima que fueron unos 15 minutos aproximadamente de emisión.

El origen de la fuga de trióxido de azufre

En el proceso de producción de coque (destilación del carbón) se genera gas de coque, que posteriormente se depura en varias fases. Una de esas fases se da en en la planta de ácido, donde se obtiene como subproducto ácido sulfúrico que se reutiliza en la instalación. Un portavoz de Arcelor-Mittal ha explicado que "durante el tratamiento final del lavado de estos gases, se registró una avería en la sonda de nivel que mide el agente del lavado (ácido sulfúrico)". Una avería en una sonda hizo que ésta reflejase que había ácido sulfúrico en el tanque que proporciona ese ácido para el lavado de gases cuando no era así y se produjo una emisión de trióxido de azufre, que duró aproximadamente entre doce y quince minutos, según las mismas fuentes. "De manera inmediata se procedió a parar la planta de ácido, ya se ha reparado la sonda de nivel y ahora estamos haciendo análisis más detallados de las causas que provocaron esa avería para reabrirla tan pronto como sea posible", ha añadido el mismo portavoz de la multinacional.