"Puede parecer que este tipo de festivales y encuentros no son necesarios porque desde hace años podemos casarnos; sin embargo bajo a esta aparente pátina de libertad y justicia existen aún formas de fobia, discursos de odio, y encumbramiento de determinados comportamientos que olvidan a los cuerpos no canónicos, a las prácticas no convencionales y a las familias no normativas". Borja Ibaseta, coordinador de actividades del Centro Niemeyer, realizó este rotundo discurso de defensa de las identidades sexuales durante la apertura del II Festival de Cine LGBTIQ, en cuya gala ejerció de anfitrión. Durante toda esta semana se sucederán las proyecciones y otras actividades.

En la gala intervino también el bailarín Jose Xtravaganza, quien agradeció el cariño del público que no ha cesado desde que hace 28 años se embarcó en su carrera como bailarín y como artista. Xtravaganza había ofrecido por la mañana una clase magistral, en la que quedó claro por qué cautivó a Madonna con su danza.

La Alcaldesa de Avilés, Mariví Monteserín, rompió una lanza en favor de garantizar los derechos de la ciudadanía, sin excluir a nadie, y se refirió al "orgullo histórico" de España de haber sido pioneros en el matrimonio entre homosexuales "Es necesario recuperar aquel espíritu. Un espíritu que alcanzó una dimensión y un proyección internacional. Y lo es especialmente en estos momentos, en los que se están cometiendo gravísimas violaciones de los derechos humanos fundamentales en muchas partes del mundo, incluidos los derechos de los gays, lesbianas, bisexuales, transexuales y queer", destacó.

Cerró la gala la intervención del viceconsejero de Cultura, Vicente Domínguez, quien hizo historia y resaltó la importancia de mantener citas como la que se desarrolla toda la semana en el Niemeyer: un festival de cine "político, militante y reivindicativo".