Una treintena de inquilinos del barrio del Nodo presentará la próxima semana ante la Cofradía de Pescadores "Virgen de las Mareas" su negativa a acatar las nuevas condiciones para sus viviendas. Los afectados -viudas, marineros y jubilados- rechazan tanto irse de sus casas como afrontar una subida de sus rentas, como les insta, a través de un burofax, la entidad marinera, propietaria de los inmuebles.

Ahora mismo, esas familias abonan unos 14 euros al mes -en esa cuantía está incluida el alquiler, la cuota de socio de "Virgen de las Mareas" y los gastos de comunidad, entre otros- y la dirección de la Cofradía plantea subidas de hasta los 200. El plazo puesto para avenirse a un acuerdo es el 31 de mayo, en la mayoría de los casos; de no hacerlo, algunas fuentes aseguran que podría iniciares un proceso de desahucio.

Los vecinos, la mayoría con escasos recursos económicos y pocos estudios, ya se han puesto manos a la obra para frenar las arremetidas de la dirección de "Virgen de las Mareas". Están en manos de un abogado, Manuel Barba, para que defienda sus intereses. El letrado alerta de que varios inquilinos ya han acudido a la sede de la Cofradía "de buena fe" con sus contratos y sus responsables "se lo están intentando cambiar por uno nuevo y con precios actualizados". "Les están engañando y amenazando con que el próximo mes de junio no les cobran el recibo de las cuotas", advierte Barba.

El abogado ya trasladó a varios de los afectados que "la razón de Derecho que está del lado de los trabajadores de la mar" y que hay "suficientes argumentos que amparan a los vecinos". Según explicó, la mayoría de los contratos de arrendamiento del Nodo son anteriores a 1995 y esos se rigen por la ley de rentas antiguas (ley de Arrendamientos Urbanos de 1964), que establece que en la duración del contrato hay prórroga forzosa; esto es, que el titular puede vivir en esa vivienda hasta que fallezca. Cuando eso suceda, incluso se permite una primera subrogación a la viuda e hijos. "Esos contratos no se pueden resolver si el inquilino cumple unas condiciones", añadió el letrado. En este caso, también juega un papel importante el Instituto Social de la Marina, promotor de las viviendas del Nodo y ente redactor de esos contratos en "términos beneficiosos para los pescadores".

Los vecinos intentarán llegar a una solución "amistosa" con la Cofradía aunque no descartan acudir a los tribunales para defender los derechos adquiridos durante años. La Cofradía de Pescadores justifica la decisión de subir la renta a los hasta ahora "intocables" por los escasos ingresos con los que cuenta la entidad tras retirarles el Puerto de Avilés la concesión del bar de la rula y la gestión del depósito de gasoil. Quieren así evitar "la asfixia económica".