"¡Ven y verás!" Con este lema, toda una invitación a la acogida, el colectivo avilesino de la Adoración Nocturna Femenina Española, ahora mismo integrado por unas sesenta mujeres (300 en toda la diócesis), lanza un llamamiento a la sociedad avilesina para darse a conocer y explicar sus actividades a las personas interesadas en participar de las mismas. Mañana mismo se las podrá encontrar a partir de las 20.00 horas en la parroquia de San Nicolás, donde tienen su sede y donde realizan las vigilias, con motivo de la celebración del 40º. cumpleaños de la entidad, que vio la luz de la mano del sacerdote Ángel Garralda y de Cristina de la Rica, primera presidenta.
En estos 40 años de actividad, las adoradoras nocturnas de Avilés nunca han dejado de acudir a venerar el Santísimo Sacramento (la hostia expuesta en una custodia sobre un altar) y orar cada primer viernes de mes siguiendo una rutina bien conocida para ellas: cita a las 22.00 horas en el claustro de San Nicolás, rezo de vísperas, misa a las 22.30 horas y, a continuación, turnos de adoración y reflexión comunitaria hasta las dos de la madrugada.
"La práctica de la adoración reporta paz espiritual y una sensación indescriptible de bienestar interior; basta ver nuestras caras cuando finaliza el ritual", comenta la actual presidenta de la asociación, María José Artime Inclán. La presidenta destaca el buen momento por el que atraviesa la adoración nocturna femenina, con una media de edad de las practicantes de unos 65 años, una señal inequívoca de que el colectivo se ha rejuvenecido en los últimos años. Aún así, el grupo cuenta con un par de decenas de socias honorarias, que son aquellas que por motivos de edad o salud no acuden regularmente a las vigilias.
La fiesta del cuadragésimo aniversario de la Adoración Nocturna Femenina de Avilés consistirá en el rezo de vísperas y una eucaristía de acción de gracias; después se servirá un refrigerio.
