Una magistrada del Juzgado de instrucción número 4 de Avilés ha inhabilitado a un ganadero de Perdones (Gozón) por un período de cuatro meses tras un vertido de purines. La juez considera que el infractor es responsable de un delito contra los recursos naturales y el medio ambiente y por ello le ha condenado también a dos meses de prisión, 600 euros de multa y la citada inhabilitación. A su vez, ha recaído otra sanción económica para la ganadería consistente en cuatrocientos euros. Los hechos que el ganadero reconoció consisten en el vaciado de la fosa séptica en una parcela colindante al arroyo Redivo y sin tomar las pertinentes precauciones.