Los vecinos de Alto el Vidriero denuncian el estado de abandono de la zona por parte del Ayuntamiento. Se quejan de la suciedad y maleza acumulada en una finca de más de 12.000 metros cuadrados, de las aceras estrechas, la falta de vigilancia, el pavimento con baches y socavones y el intenso tráfico, en ocasiones con coches que circulan a una velocidad superior a la permitida y el consiguiente peligro para otros vehículos y peatones.