La familia que cuida el palacio de Trasona y que regenta el bar que ocupa los bajos del edificio defiende que la entrada al inmueble, declarado Bien de Interés Cultural (BIC), está debidamente controlada. Esto, sin embargo, es precisamente lo que niega el informe que realizó el arquitecto del Ayuntamiento de Corvera sobre el mal estado del palacio. En este informe se puede leer, entre otras cosas, que "dado el mal estado del inmueble requiere la ejecución de obras que aseguren su estabilidad, así como que eviten el acceso de personas de forma incontrolada".

"Nadie niega que tenga deficiencias, pero no es cierto que el acceso sea libre, solo entra quien nosotros queremos. La valla permanece cerrada cuando no estamos y por las noches. Nadie entra si no estamos", sostiene Silvino Prendes, empleado de los propietarios del palacio y al cuidado del histórico edificio.

Prendes también difiere de lo recogido en el informe en lo que se refiere a que existen desprendimientos en las cornisas y grietas en la fachada: "No tiene sentido que digan que se deja entrar a todo el mundo. El informe dice que la valla se colocó a requerimiento municipal y no es cierto. Lo pidieron los propietarios y en un principio el Ayuntamiento no quería colocarla, aunque finalmente llegaron a un acuerdo". El guardés del palacio señala que ese control de la entrada solo se pasa por alto durante las fiestas y por petición del Ayuntamiento. En la jira al Pantano y en la noche de la hoguera, debido a la afluencia de público, la valla permanece abierta. Sí reconoce que hay una entrada dañada, pero "el acuerdo es que la arreglara el Ayuntamiento y hace tiempo que se le comunicó".

Prendes también se refiere a otro de los puntos del informe, que recoge que "existen recrecidos y volúmenes adosados con materiales inapropiados", es decir, que no coinciden con los que se utilizaron en la construcción original: "Se puede referir a la grieta que arregló el propio Ayuntamiento, por orden del anterior arquitecto. Colocaron cemento para reforzar la estructura, pero fueron ellos".

El palacio de Trasona es también conocido como el de los Rodríguez de León. Su construcción comenzó en el siglo XV y fue ampliado dos siglos después.