La noche del sábado del Carmen en Luanco fue movidita para los servicios de salvamento. Dos llamadas dieron la voz de alerta al 112 de que había alguien pidiendo auxilio en la playa y eso activó todos los protocolos de emergencia: hasta la dársena acudieron un helicóptero, bomberos y una embarcación de Salvamento Marítimo con buzos para buscar a la persona. También acudieron agentes de la Policía Local y de la Guardia Civil y, más tarde, se sumó el personal de socorrismo, que acompañó la búsqueda con su propia lancha. Al final todo quedó en un susto ya que nadie había desaparecido. Eso sí, la presencia de los servicios de emergencia dio pie a todo tipo de rumorología. Se llegó a decir hasta que había aparecido un cadáver. Todo falso.

Los hechos ocurrieron bien entrada la madrugada, en torno a las tres de la mañana. En la playa, supuestamente, había un grupo de chavales disfrutando de las fiestas y según algunas fuentes, uno de ellos se estaba bañando y tenía dificultades para salir del agua. Alguien que lo vio llamó de inmediato al 112 que, por protocolo, envió a Luanco a personal experto. Pero nadie denunció ninguna desaparición ni en la playa había gente buscando al supuesto ahogado. El helicóptero llegó a las cuatro de la mañana y durante varias horas recorrió la costa luanquina en busca de alguna señal alumbrando con un gran foco. El coste de operativo es de 9.000 euros..