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Intensos movimientos en la política local

La "confluencia de izquierdas", congelada

Podemos frena una propuesta para iniciar contactos con IU y Ganemos de cara a una coalición La eurodiputada Tania González, figura emergente

Por la izquierda, David Salcines, Tania González y Carmen Conde, concejala de IU, en un reciente acto de apoyo al ferrocarril público, en la estación de Avilés. RICARDO SOLÍS

Los movimientos para conformar una "confluencia de izquierdas", es decir, una coalición electoral entre Podemos, IU y Ganemos de cara a los próximos comicios municipales han comenzado a paso lento y con recelos entre las partes implicadas, después de que estas mismas negociaciones naufragaran en 2015.

El concejal de Ganemos, Agustín Sánchez, envió hace unos días sendos correos a David Salcines (secretario general de Podemos y portavoz municipal de Somos, su marca afín) y a Juan José Fernández (coordinador general de IU) para abrir un período de conversaciones a tres bandas. Pero se ha encontrado con el freno de la formación morada, que considera prematuros estos contactos sin haber celebrado aún sus propios procesos internos a escala regional y local y cuando es difícil aventurar la situación política, social y económica que habrá dentro de dos años, momento de acudir a las urnas. En medio de estas miradas de reojo ha emergido la figura de la eurodiputada de Podemos Tania González, cada vez más presente en actos públicos en Avilés y que ha empezado a sonar, aún de forma remota, como una opción para la Alcaldía.

"Aún es pronto". Esta frase resume la respuesta por escrito de Salcines a la petición de diálogo de Sánchez para avanzar en un pacto que intente arrebatarle el poder al PSOE en 2019. Una postura que contrasta con la de IU, hasta el punto de que representantes de esta formación han mantenido ya un primer encuentro con el concejal de Ganemos, que apenas sirvió para constatar que cualquier intento de avance será inútil sin contar con Podemos (y con otras sensibilidades que aglutinó la marca electoral Somos). Los contactos están pues congelados y no parece que el verano vaya a calentarlos.

Porque los cuadros avilesinos de Podemos tienen claro que no moverán ficha antes de conocer por dónde irán los tiros del partido en Asturias ni de aclarar su propia situación interna (sin ir más lejos, es una incógnita qué papel jugará Salcines en un futuro). Además, consideran que su formación se encuentra en una clara posición dominante con respecto a las otros dos en base a los resultados obtenidos en los últimos comicios locales, autonómicos y generales. De hecho, una distribución de los puestos en una hipotética lista de la "confluencia" en base a los votos logrados en mayo de 2015 relegaría a IU al cuarto puesto y a Ganemos, al décimo. "No hay prisa", insisten en la formación morada.

Tan poca tienen que ha empezado a cuajar la idea de que una negociación de este tipo sólo será posible, en el caso de que lo fuera, a seis meses vista de las elecciones. Es decir, a finales del próximo año. Además, los dirigentes "morados" aún están pendientes de conocer de primera mano la postura del recién elegido coordinador general de IU, un veterano de la política municipal que acaba de regresar al primer plano tras unos años de muchos cambios. No obstante, las relaciones de Somos con el grupo municipal de la coalición, ahora comandado por Llarina González, son buenas y hasta de colaboración.

Mientras, en IU están expectantes tras la negativa de Podemos a iniciar ya las reuniones para trabajar en una posible coalición electoral. La coalición considera que sería necesario pactar no sólo la lista sino también el candidato. Por eso, sus dirigentes, que a priori se muestran férreos partidarios de la "confluencia", no quieren aún que comience un baile de nombres.

De todas formas, desde hace un par de meses, no para de ganar fuerza el de Tania González. La eurodiputada fue una de las grandes impulsoras de Podemos en Avilés y en otros concejos de la comarca y acumula tres años de experiencia en las instituciones comunitarias. Últimamente, ha participado en varios actos en la ciudad, la mayoría centrados en urbanismo y transportes, como el que tuvo lugar hace apenas dos semanas en la Casa de Cultura, donde defendió, junto a colectivos de toda España, el ferrocarril público, "ante las pulsiones privatizadoras de Europa".

Dos años en política son una eternidad, pero la posibilidad de una coalición entre las fuerzas municipales a la izquierda del PSOE vuelve a estar sobre la mesa. Frustraciones del pasado y renovadas esperanzas marcarán a partir de ahora el devenir de este proyecto. El camino se presenta largo.

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