Las fiestas de San Agustín acogerán el estreno de la obra musical "Avilés, 1900", del poeta avilesino Santiago García-Castañón.

La primera función se representará el día 23 en el parque de Ferrera (22.30 horas) y contará con la presencia de Emilio Menéndez (tenor), Ana Peinado (soprano), Alberto Marcos (barítono), Juan Méndez (piano) y Miguel Herrero (multinstrumentista).

El montaje lo dirige Andrés Presumido y cuenta con la producción de Béznar Arias. La obra es una suma de las canciones más populares del folclore avilesino. Estas canciones están hiladas con los textos escritos por García-Castañón. Arias fue el productor de otro musical de asunto avilesino: "La carrera de América", cuyo libreto escribió Juan Carlos de La Madrid con música de Rubén Díez.

La concejala Ana Hevia destacó en la presentación el valor de este proyecto musical "que rescata el repertorio popular de tradición oral de la ciudad", se mostró convencida de que su estreno "será todo un éxito" y destacó: "Hemos elegido como escenario para su puesta en escena un entorno especial y privilegiado como es el parque de Ferrera".

La zarzuela, que tendrá una duración de 90 minutos, se basa en una idea y montaje creada por Majo Muñiz Riestra en septiembre de 1964. El espectáculo ambiciona dignificar el repertorio tradicional oral musical de Avilés al trascender el formato de concierto y crear una producción unificada y cohesionada.

En la obra, tres personajes avilesinos de principios del siglo XX discurren por las principales calles de Avilés: Rivero, "El Parche", Galiana, y Sabugo. El público se encontrará con música avilesina y también con personajes de la vida local de la época que el narrador se encargará de contextualizar.

El elenco artístico encargado de dar forma a esta producción está compuesto por artistas asturianos, en su mayoría de Avilés, entre quienes destaca el tenor avilesino Emilio Menéndez, defensor de la música tradicional local que se encarga de exhibir en varios conciertos y discos.

A Emilio Menéndez se suman la soprano Ana Peinado y el barítono Alberto Marcos, que otorgan una personalidad propia a diversos personajes y roles de la época que se mantienen en cada una de las canciones interpretadas en la producción, lo que aporta continuidad a la obra.

A los cantantes solistas les acompaña una formación casi de cámara, compuesta por piano, violín, flauta, bajo y percusión, que desarrolla de forma tímbrica el repertorio y que establece unas bases instrumentales para una posible orquestación en un futuro.

Imprescindible es también la participación del coro como elemento de nexo, especialmente en un repertorio como el que presenta "Avilés 1900" ya que esta "voz popular" ha sido la formación que ha conservado en muchas ocasiones esta música a lo largo de los años. Y no podía faltar un grupo de baile que representará una danza prima durante el espectáculo.