Un grupo de vecinos de Llaranes Viejo ha mostrado su preocupación por la merma de efectivos de la colonia de gatos que habita en la trasera del número 11. "Desde mayo se redujo prácticamente a la mitad", señaló una de las personas que habitualmente hace seguimiento de la colonia. Además, muchos de los felinos no se encuentran en buenas condiciones.
Las causas de esta merma son, de momento, una incógnita. Sin descartar otras posibilidades, los supervisores de la colonia sí reconocen que al ser zona rural es habitual que el número de gatos oscile de un mes a otro. No ocurre así en las colonias urbanas, que son mucho más estables en cuanto a número de miembros.
