A España y América Latina les unen importantes lazos históricos y culturales, y ahora, también de agua. Un pedazo del mar Cantábrico se unirá el próximo 4 de septiembre con el océano Pacífico en un nuevo ritual del hermanamiento de "Unión de los océanos", que promueve la Fundación Philippe Cousteau, y que se celebrará en Puerto Vallarta. Ayer, los alcaldes de Gozón y Carreño, Jorge Suárez y Amelia Fernández, hicieron entrega de una botella con el líquido recogido en las inmediaciones del Cabo Peñas al secretario de la fundación, Rafael Lobeto, en un acto organizado en el Museo Marítimo de Asturias.

Lobeto aprovechó la ocasión para anunciar la celebración de un ciclo de conferencias junto con las fundaciones Emilio Barbón y Titanic. Además, entre el 28 y el 30 de septiembre habrá en Asturias un programa de cooperación con Cuba y la previsión es que el Museo también acoja parte de los actos organizados.

El acto de ayer fue la continuación del celebrado el pasado 28 de julio, cuando en la playa de Luanco se diluyó agua del Atlántico sur, del Pacífico sur, de Río de Janeiro (Brasil), Ferrol y Fuerteventura junto con la recogida en Verdicio. Se puso la primera piedra del templo de los océanos en la capital gozoniega, que se suma a los que hay en Castrillón y Carreño, por ejemplo.

Lobeto no sólo llevará a México una botella con agua del Cantábrico, también libros de poemas del gozoniego Aurelio González Ovies y cartas del Alcalde a los dirigentes de Puerto Vallarta, en la que le transmite su "amistad y unión solidaria" a través de las aguas y les anima a visitar Gozón y Asturias.

Puerto Vallarta acogerá este año el 11.º Foro internacional PIBP sobre protección marítima y portuaria. La Fundación confía en conseguir traer a Asturias la duodécima.