Los vecinos de Soto del Barco se fueron ayer de baile, a pesar de la tormenta. La asociación "Clarín" organizó una jornada de confraternización, con cena incluida, a la que asistieron decenas de residentes y de familiares y amigos. No faltó la música, a cargo de un "pinchadiscos". Los presentes disfrutaron de una tarde invernal aún en verano, pero pasaron un rato de lo más divertido, dando muestras de unión y buen ambiente.

Los organizadores tenían pensado en un principio que el baile tuviera lugar en la plaza situada junto a la Casa de Cultura de Soto del Barco, pero los aguaceros que cayeron constantemente durante toda la tarde obligaron a trasladar la fiesta a los bajos municipales del centro de Servicios Sociales. En ese lugar, disfrutaron de temas musicales de lo más variado gracias a la presencia de un DJ que hizo las delicias de los asistentes.

Fue antes y, sobre todo, después de una cena de confraternización que llenó los bajos del edificio de servicios sociales. Mucha animación y la evidencia de que los vecinos de Soto del Barco son capaces de unir fuerzas para pasar un buen rato. De hecho, la asociación Clarín ha organizado en los últimos meses numerosas actividades para dinamizar la vida del concejo, como excursiones a diferentes puntos de Asturias. Así surgió la idea de montar el baile que ayer divirtió a la localidad y a residentes en otras próximas, porque también hubo presencia de lugares vecinos y de otros municipios de la geografía asturiana.

"Lo hemos hecho para pasar un rato agradable, charlar y disfrutar del fin de semana en compañía de nuestros familiares y de nuestros amigos", comentó uno de los organizadores, tras reconocer que buena parte de las conversaciones giraron en torno al derbi que disputaron ayer en El Molinón el Sporting de Gijón y el Oviedo, los dos grandes conjuntos del fútbol asturiano. "Había aficionados de los dos equipos, que analizaron el partido sin parar. Luego, tocó cena y baile", señaló este residente. Los asistentes se conjuraron para repetir.