Agentes de la Policía Local de Avilés y Gijón protagonizaron en la noche del lunes una persecución a un motorista, avilesino de 45 años, que huyó de un alto de los policías en Avilés y fue detenido a la altura de Viesques tras circular de forma temeraria por la autopista A-8. Tras la detención, se le practicó la prueba de alcohol y dio positivo, algo que volvió a ocurrir este martes en un control de alcoholemia rutinario en el que el mismo conductor, en esta ocasión en un turismo, volvió a dar positivo.

Según explican desde el Ayuntamiento de Avilés, sobre las 23.50 horas del lunes 18 de setiembre, una patrulla del servicio de vigilancia municipal es testigo de un derrape de una motocicleta al salir del estacionamiento que ocupaba en la calle Juan XXIII. A través del registro de vehículos de la Dirección General de Tráfico, los agentes comprueban que el vehículo tiene la inspección técnica caducada. Los agentes, según las mismas fuentes, intentaron darle el alto en la calle San Agustín, pero el conductor "aceleró de forma brusca no respetando la fase roja del semáforo del cruce con la calle Severo Ochoa". El conductor no se detuvo y continuó su marcha para, en la Cruz de Illas, acceder a la autopista A-8 en dirección a Gijón y Oviedo.

Los municipales avilesinos avisaron entonces a la Policía Local de Gijón y Oviedo para tratar de detener al conductor del vehículo, que en su huída se dirige a Gijón, donde los agentes tratan de darle el alto en dos ocasiones, consiguiendo en la segunda, que el se detuviera, al cortar el tráfico de la autopista. Los agentes, según explican desde el Consistorio, reseñaron en el atestado que el conductor "no cumplió las normas más básicas de circulación, tales como la de no respetar luces rojas de semáforo, no ceder el paso en intersecciones, invadir los carriles de sentido opuesto y circular a más de 150 km/h en varios tramos de la persecución, llegando a poner en peligro al resto de usuarios de la vía".

Una vez detenido, fue sometido a las pruebas de alcohol y drogas arrojando un resultado positivo en ambas. Le fueron imputados dos delitos contra la seguridad vial, el de conducción temeraria y conducir bajo la influencia de alcohol y drogas. Asimismo se pudo comprobar que carecía de permiso de conducción de la clase A (exigido para la conducción de motocicletas) y no podía conducir al no haber realizado curso después de una sentencia penal de privación de permiso de conducción. Ese mismo conductor fue nuevamente detectado ayer martes en un control de alcoholemia que se realizaba en Avilés. Conducía un turismo y dio resultado positivo en alcohol, siendo denunciado en vía administrativa.